Por Francesca Scoleri - 30 de Septiembre de 2016“El empresario Silvio Berlusconi estipuló un acuerdo ‘de protección’ con las familias mafiosas de Palermo, un pacto que estuvo vigente mínimo hasta 1992”.Esta es la conclusión de la sentencia definitiva que condena a Marcello Dell’Utri por delitos de mafia, el fundador de “Forza Italia”, el partido de Berlusconi, “El Presidente” tan querido para muchos vip nacionales e internacionales que ayer se alternaron en una avalancha de saludos afectuosos y llenos de estima. Estima hacia el hombre que “estipuló un acuerdo ‘de protección’ con las familias mafiosas de Palermo”.
Vip que tal vez se les pueda ver con pañuelo en mano durante las conmemoraciones de los atentados en los que perdieron la vida magistrados y sus agentes de escolta, asesinados por la mafia que “estipuló un acuerdo ‘de protección con Silvio Berlusconi’”.
En una conversación grabada a escondidas por el personal trainer de Emilio Fede, el “periodista” que inventó el Noticiero ad personam, él da esta explicación a las riquezas de Berlusconi: “¿La verdadera historia de Berlusconi? Mafia, mafia, mafia, dinero, mafia”. Y si Emilio Fede lo dice...
Felicidades decíamos, de estima, admiración y respeto, la programación de las redes televisivas de “Mediaset” del día de ayer, propuso una seguidilla de felicitaciones por parte de todos los empleados prestigiosos que con un discurso ambiguo elogiaron a la enésima potencia al hombre que cada 6 meses, según las revelaciones de Totò Riina cuando fue interceptado durante su hora de aire y a las declaraciones escritas encontradas entre los apuntes de Vito Ciancimino, depositaba 250 millones en las arcas de la mafia. “Felicidades Presidente...”.
Vip amados y seguidos por todos los italianos, un coro unánime que presenta la imagen perfecta del hombre sabio de gran experiencia empresarial y de gran humildad. Una operación que apuntaba a ocultar el verdadero rostro de Silvio Berlusconi, el hombre que ha ocupado las instituciones con el apoyo electoral de la mafia y que ha manipulado la legislatura a su merced mientras que Italia entraba en el remolino de la crisis económica.
El imputado Silvio Berlusconi que emprendió la operación de castigo en contra de los magistrados, que ahora lleva adelante el Gobierno de Renzi. El condenado Silvio Berlusconi que con la falsificación de balance, fraude fiscal y apropiación indebida, ha hecho grande la empresa que alberga a los vip indolentes. El prescripto Silvio Berlusconi, que gracias a las leyes formuladas a la medida de los juicios en su contra, se salvó de recibir innumerables condenas. Mister “El hecho no constituye delito”, esta es la frase que acompaña los numerosos expedientes en su contra. Y ¿cómo puede ser? Sus Gobiernos han diezmado la lista de delitos que lo veían como directo interesado.
Lo recordaremos por sus “cenas elegantes” en las que prostitutas, incluso menores de edad, aliviaban las penas del ex Presidente del Consejo, quien de su cargo institucional decía “en mi tiempo libre trabajo de Primer Ministro”. Y también lo recordaremos por la gran humanidad con la que distribuye una lluvia de dinero a todos los testigos del proceso judicial por el caso Ruby, la roba corazones que pasará, ella sí, a la historia como la “sobrina de Mubarak”. La generosidad de este hombre...
Y ¿qué decir de su humildad? Imaginaos, un italo-americano que deseaba recibirlo en el Columbus Day americano ¿cómo hizo para ponerse en contacto con él? lo llamó por teléfono a un delincuente cercano a Bernardo Provenzano. La llamada telefónica fue interceptada, el americano dice: “-Quiero a Berlusconi y le dije a Nicola como hay que hacer. Él tiene buenas relaciones con Bush” y el mafioso italiano responde: “-Claro, apenas lo veo se lo digo”. Es difícil encontrar a un Primer Ministro así, en otros países quiero decir. En cambio aquí, con estos antecedentes, se va de mal en peor pero... “felicidades Presidente...”.
Que se avergüencen los vip y quienes enviaron video-mensajes de elogio y estima. En lo que a mí respecta no existe el “concurso externo en asociación mafiosa”, quien mantiene relaciones con la mafia pasa a ser un mafioso en todo sentido, un criminal en su accionar de la misma forma que aquel que se afilia directamente y cuando se trata de políticos son criminales aún peores dado el agravante de la “traición al pueblo y a la Constitución”.
¿Hay atenuantes para quienes ignoran todo esto? ¡No, ninguno!
Extraído de: themisemetis.com