Atlantide, el programa de Andrea Purgatori se emitió en La7 en la noche de 18 de mayo
Por Giorgio Bongiovanni – 19 de mayo del 2019
Fue un episodio histórico el que se emitió ayer por la noche en La7, en el programa "Atlantide", de Andrea Purgatori, con un título inequívoco: "Masacre de Capaci: las verdades incómodas". Finalmente, una red nacional dedicó un especial, para mostrar a las jóvenes generaciones, para contar lo que sucedió en ese trágico 23 de mayo de 1992, sin seguir el esquema de la retórica y el boca a boca que se utilizan a menudo en las pasarelas de las conmemoraciones. Una transmisión en la que se formularon las múltiples preguntas que surgen del atentado en el que perdieron la vida el juez Giovanni Falcone, su esposa Francesca Morvillo y los agentes de su escolta Antonio Montinaro, Rocco Dicillo y Vito Schifani.
La minuciosa investigación hizo uso de los recuerdos y contribuciones de testigos como el fiscal adjunto Vittorio Teresi, el ex presidente del Tribunal de Palermo y ex miembro del primer grupo de jueces antimafia, Leonardo Guarnotta, los agentes Giuseppe Sammarco (nombre en código), Antonello Marini, Raniero Recupero, Ernesto Casiglia, el experto en explosivos Antonino Coppolino, por nombrar sólo algunos. Particularmente efectivos y emocionantes los flashbacks con las voces de entrevistas de radio y los diálogos de los momentos posteriores a la masacre, para coordinar la ayuda a decenas de heridos, incluidos los agentes de custodia sobrevivientes (Paolo Capuzzo, Angelo Corbo, Gaspare Cervello y el conductor del poder judicial Giuseppe Costanza) debido a la explosión en la autopista.
Pero el momento más destacado fue, sin dudas, la parte dedicada a la búsqueda de la verdad. Quien dio una respuesta a las preguntas de Purgatori hablando de un pacto criminal como clave de lectura, lo cual puede parecer extraño pero fue corroborado de manera científica por los elementos que surgieron durante los juicios e investigaciones de estos 27 años desde la masacre, fue el fiscal nacional antimafia Antonino Di Matteo, que es uno de los protagonistas de la magistratura en los años posteriores a la masacre, y quien se ocupó en particular de las investigaciones realizadas en Via d'Amelio, pero también es un conocedor de los aspectos de la masacre de Capaci y las posibles conexiones externas, por cuanto ambos hechos están comprendidos en el período histórico de la negociación Estado-mafia que se llevó a cabo en esos años, y en el cual trabajó recientemente junto con los fiscales Vittorio Teresi, Francesco Del Bene y Roberto Tartaglia.
Di Matteo explicó de tal modo que la masacre probablemente fue dirigida y que, más allá de la existencia de autores intelectuales y participantes externos, se sospecha de la presencia de sujetos ajenos a Cosa Nostra también en la fase operativa-material.
Otra contribución importante fue la que hizo el periodista y escritor Saverio Lodato, nuestro editorialista, quien por primera vez contó algunos antecedentes de esa entrevista que Falcone le dio después del atentado de Addaura (donde el magistrado habló de "mentes refinadas") revelando que fue invitado por Falcone a su casa junto al mar. Recordó haber visto a un hombre que estaba solo pero decidido a dejar un mensaje que pudieran entender tanto los que gobernaban en ese momento como los que estaban en la oposición, insinuando lo que él había entendido, que Cosa Nostra había sido inspirada, sugerida y también coordinada por fuerzas externas en sus operaciones de muerte y en sus estrategias. Además, Lodato, en ese momento protagonista como corresponsal de "L’Unita", hizo un retrato de esos años recordando las deslegitimaciones y los aislamientos sufridos por Falcone. Por eso informamos de las intervenciones de Di Matteo y Lodato en forma integral. Porque recordar veintisiete años después no puede prescindir de la búsqueda de la verdad.
La entrevista de Andrea Purgatori al fiscal nacional antimafia Nino Di Matteo. Transcripción completa:
-Fiscal Di Matteo han pasado 27 años desde la masacre de Capaci ¿qué sensación le da al pensar en ese día y todo lo que sucedió después?
-La masacre de Capaci seguirá siendo un momento indeleble en la memoria de los italianos, para bien, de aquellos que quieren la legalidad en el país. Fue la primera de las siete masacres llevadas a cabo entre 1992 y 1993. Fue descarado. Fue hecho para hacer saltar por los aires a Giovanni Falcone junto con un pedazo de carretera. Fue un ataque único en Italia en su fase de ejecución. Un ataque llevado a cabo con una precisión y violencia que realmente y de inmediato sumió al país en el pánico. Fue un atentado, según dicen las sentencias, contra el único hombre y juez que en ese momento había personificado más que ninguno, la idea y la inteligencia de luchar contra la mafia a 360º. Falcone, un hombre que desafortunadamente aquí en Italia fue violentamente enfrentado por muchos mientras el mundo lo envidiaba. El de Capaci fue un ataque, luego de la celebración de los procesos y de 27 años de investigaciones, que no fue hecho solo por razones de venganza, porque el juez había instruido el maxi proceso.
-Esto sí se dijo, se dio como una razón que la Casación confirmó las condenas del maxi proceso y que eso condujo a Cosa Nostra a la locura.
-El propósito de la venganza existía, pero no fue la única razón del atentado. Hubo una motivación preventiva, porque Falcone, al inspirar al gobierno en la política de lucha contra la mafia, a través del Ministro Martelli, estaba causando daños a Cosa Nostra y a otros también se los habría causado.
-A pesar de la deslegitimación, el hecho de su transferencia a Roma siempre como magistrado al servicio del Estado y de la política, metía palos en la rueda y habría creado más problemas para el crimen organizado ¿es así?
-Le respondo con una palabra que Riina le dijo a sus jefes de la mafia en el momento de la comisión: Falcone está haciendo más daño en Roma que en Palermo. Un juez inteligente y un hombre de Estado valiente, capaz de inspirar una política justa y la lucha a la mafia desde el gobierno, estaba poniendo en crisis a Cosa Nostra, incluso más que las sentencias que Giovanni Falcone había ayudado a dictar en el maxi proceso. Pero hay otro propósito que emerge claramente y es el terrorismo. Con la masacre de Capaci, Cosa Nostra comenzó a desplegar una política de terror, que apuntaba a crear nuevas relaciones con otros políticos de importancia, distintas de aquellas que habían traicionado la tesis de Cosa Nostra y las promesas hechas.
-¿Podemos incluir a Salvo Lima? Asesinado unos meses antes de Capaci.
-El homicidio de Salvo Lima es la primera fase de la estrategia política que la mafia denominó la limpieza de las ramas secas. Y ellos pensaban, siguiendo siempre con las palabras de Riina, que: era necesario hacer la guerra para luego hacer la paz. La guerra implicó la realización de acciones sensacionales que provocaron pánico en la población y que indujo a alguien del Estado a mediar en la mafia. Y a través de esta negociación, Riina pensaba crear relaciones políticas más estables que las anteriores.
-Algo que se pudo demostrar en las audiencias del proceso de la tratativa es que en algún momento esta guerra, según la sentencia de primera instancia, lleva al Estado a buscar un contacto.
-Desafortunadamente, después del atentado a Falcone, algunos funcionarios del Estado le preguntaron a Riina qué quería Cosa Nostra para detener el ataque a las instituciones. En ese momento comenzó una negociación que tuvo terribles consecuencias, ya que no evitó la sangre, sino que causó más. Como siempre sucede, cuando Cosa Nostra se dio cuenta de que el Estado había comenzado a doblar las rodillas, aumentó el precio organizando más masacres para obligar a las instituciones a arrodillarse permanentemente.
-Porque el Estado estaba frágil en ese momento...
-Sí.
-Después de 27 años, podemos hacer dos cosas: recordar la masacre de Capaci como un momento de conmemoración y memoria, quizás pensando que hubo sentencias y nombres que han sido alineados. Responsables de que, aparentemente, todo esté muy claro.
-Los procesos que se celebraron no fueron inútiles y permitieron el logro de metas importantes. Más de veinte mafiosos que participaron en otras masacres y en la de Capaci han sido condenados en forma definitiva. El resultado fue importante. Pero la verdad que se acreditó, yo diría que con pleno conocimiento de los hechos, sigue siendo una verdad parcial. Solo por el conocimiento de las investigaciones y los actos procesales, la lectura analítica de las sentencias dictadas nos lleva a creer que fue posible, es más, me siento inclinado a decir que fue muy probable, que junto a los hombres de Cosa Nostra participaran en los atentados, en el momento de las masacres, de su organización y ejecución, personas ajenas a la mafia.
-Entonces ¿hay que imaginar una doble línea de comando?
-Debemos imaginar que la innegable convergencia de intereses que condujo a la decisión de eliminar a Falcone pudo haber estado acompañada por la participación de hombres que no eran mafiosos.
-¿Y a quiénes podían pertenecer?
-Podríamos intentar, con éxito, darles un nombre o apellido a las entidades externas que participaron en las masacres. Hay un antecedente, que muchos tienden a olvidar, y es que cuando en junio de 1989 se produjo el ataque en Addaura en su casa junto al mar, inmediatamente Falcone le hizo una confidencia al periodista Saverio Lodato, una declaración que era fruto de su gran inteligencia y conocimiento de los hechos. Falcone dijo que había entidades externas con "mentes refinadísimas" que habían dirigido la acción de Cosa Nostra. Se refería a su situación y al atentado en su contra. Ya en 1989, Falcone sospechaba que además de la mafia había otros personajes que querían su muerte.
-Atentado en el que, hasta esa mañana, había una serie de voces que sostenía que el ataque se lo había realizado él mismo.
-Esta situación surgió en los procesos que se celebraron. Creo que Falcone, a pesar de haber sufrido tantas derrotas y amarguras, sintió una amargura aún mayor al ser acusado de auto organizar el ataque debido a su ambición de protagonismo. Una acusación tremenda para quien ya se sabía un muerto que todavía caminaba. Yo pienso que tenemos una obligación hacia Giovanni Falcone, Francesca Morvillo y los valientes agentes de la escolta, el deber de no aceptar ni resignarnos a un ejercicio retórico y estéril de la memoria. Tenemos el deber de completar el camino de la verdad que ya comenzó hace años. Hay razones para ello.
-Una de esas razones podría ser: ¿por qué Cosa Nostra intenta realizar el ataque en Roma y luego se traslada a Palermo?
-La primera es esta: Cosa Nostra ya estaba lista con algunos hombres, entre ellos los hermanos Graviano y Matteo Messina Denaro, para matar a Giovanni Falcone. Ya estaban en Roma y habían estudiado los hábitos del magistrado y cómo a menudo se movía a pie y, a veces, sin escolta. Tenían todo listo para matarlo en un ataque bastante simple con armas Kalashnikov. Pero fueron llamados repentinamente por Riina, quien detuvo a ejecución que estaba ya en la fase preparatoria y llamó a ese comando a Palermo. ¿Por qué se pospuso la eliminación de Giovanni Falcone que en ese momento estaba casi lista y se prefirió un ataque difícil en su preparación y ejecución? ¿Debido a qué se subestimó la alarma que, incluso antes de la masacre de Capaci y después del asesinato en Lima, diera el Ministro del Interior Scotti cuando pronunció un llamativo discurso en el Parlamento que anunciaba una larga serie de atentados? ¿Por qué fue subestimado y definido como una falsificación de Giulio Andreotti? ¿Por qué inmediatamente después, a pesar de que la trágica predicción de Scotti se consumó con la masacre de Capaci, el ministro fue reemplazado cuando se formó un nuevo gobierno y fue derivado al de Relaciones Exteriores?
-Si tuviéramos que dar una respuesta a este acto de guerra ¿qué podríamos decir?
-Una respuesta está relacionada con el propósito y en tal sentido puede decirse que matar a Falcone en Roma, a pesar de ser un crimen de Estado, hubiera sido sólo un crimen. Otra cosa, desde el punto de vista del terror político provocado, fue hacer saltar por el aire un pedazo de autopista. Pero también es posible que Riina haya cambiado de opinión cuando tuvo la seguridad de contar con ayuda externa en la ejecución para llevar a cabo la masacre, por parte de quienes no eran mafiosos. Fue un ataque realmente sensacional y muy difícil de preparar. En la visión de quienes lo hicieron fue realmente buena. Murieron los que debían morir, sin que hubiera consecuencias para otros que pasaban en ese momento por la autopista. Una operación criminal perfectamente exitosa. ¿Qué significa el dato objetivo que no lejos del cráter de la masacre de Capaci se hayan encontrado folletos referentes al servicio secreto del jefe de la central de Palermo en servicio en ese momento, y otras referencias más a ese servicio secreto?
-Lo cual ciertamente no fue dejado al azar...
-Hay testimonios dados inmediatamente después de la masacre que informan que se detectó la presencia en los días previos al 23 de mayo de falsos trabajadores con ropa de operarios que efectuaban labores en la zona donde a Falcone lo hicieron saltar por los aires.
-Donde había un túnel preparado con 400 kg de explosivos...
-Todos los organismos responsables de hacer esos trabajos negaron haber estado en el lugar. Sin embargo, hay testigos que notaron la presencia de quienes, ciertamente, no eran mafiosos.
-¿También se encontró un guante de mujer?
-Se encontró, no lejos del lugar de la explosión, un guante del cual se aisló un ADN femenino, Es difícil de pensar que los mafiosos hayan llevado con ellos a Capaci a una mujer.
-¿Entonces, en aquel momento, ese ADN no pudo ser atribuido a nadie?
-No. Es solo una coincidencia que el control remoto fuera proporcionado por, dijo la sentencia, el mafioso Pietro Rampulla, que tenía un pasado subversivo de extrema derecha, y también que Rampulla, un experto artillero, justo el 23 de mayo haya ido a Capaci, advirtiendo a Brusca y a los demás apenas unas horas antes de un repentino compromiso.
-El hombre que organizó el tema del control remoto y que pudo haberlo hecho funcionar en la mañana dijo que no podía ir.
-Eso es lo que dice la sentencia, que el hombre que operó el control remoto, es decir Giovanni Brusca, luego se convirtió en un colaborador de la justicia.
-Giovanni Brusca tiene una duda cuando debe presionar el botón y ese momento de centésimos de segundo podrían haber hecho fallar el golpe al convoy por estar demasiado adelante o muy atrás y la operación hubiera sido completamente diferente. Y sin embargo, a pesar de la vacilación, todo funcionó perfectamente.
-Brusca afirmó que, inmediatamente después de darse cuenta de que los autos habían saltado por los aires y el ataque había tenido éxito, él mismo no creía que "cuatro personas ignorantes pudieran lograr esa consecuencia".
-¿Hay sospechas de que no haya habido solo un control remoto?
-Todavía hay investigaciones en curso para ver si, junto a los hombres de la mafia, existieron otros sujetos que habrían podido, independientemente del conocimiento de Cosa Nostra, ayudar a realizar un atentado técnicamente tan difícil.
-Que en todos los casos debía atribuirse sólo a Cosa Nostra...
-Es una hipótesis muy difícil de probar pero que tenemos el deber de investigar. Un deber más evidente si nos fijamos en toda la historia. Porque los archivos informáticos que guardaba Falcone fueron manipulados. Y la computadora dentro del Ministerio fue manipulada inmediatamente después de la masacre.
-¿Entonces no se sabe lo que se perdió?
-Sabemos por hombres muy cercanos a Falcone, como su cuñado Alfredo Morvillo, que el juez en ese momento seguía prestando especial atención al caso Gladio. Tenía con él la lista de participantes que fue difundida en 1990 por Andreotti.
-Eso enfureció al jefe del SISMI Martini y al presidente Cossiga.
-Exactamente. En ese momento, cuando Falcone ya no estaba en la Fiscalía de Palermo, sino en la oficina de asuntos penales del Ministerio de Justicia en Roma, continuó investigando el caso Gladio.
-¿No era fácil saber que estaba trabajando en ello?
-No debemos olvidar que Giovanni Falcone había investigado durante mucho tiempo y creía en la colaboración entre la mafia y la derecha subversiva en el asesinato de Piersanti Mattarella. Y no debemos olvidar tampoco que en el último período de su presencia en Palermo, Falcone había recopilado las declaraciones pertenecientes a esa ala política, incluso antes de que saliera la lista de Gladio y probablemente esas declaraciones pudieran referirse a la existencia de esa estrategia secreta, incluso antes de que Andreotti revelara la existencia de la lista de gladiadores. Falcone expresa en algunas notas que la entregará a la periodista Liliana Milella de IlSole24ore.
-¿Qué estaba escrito en esas notas?
-Estaba toda la rabia y la ira de Falcone cuando el fiscal jefe de Palermo Giammanco encontró la forma de excluir al magistrado cuando quiso profundizar en las relaciones entre Gladio y la mafia, y cuando también estaba investigando a la oficina de los fiscales de Roma. Más recientemente, en 2013, durante las investigaciones colaterales a las del juicio de la Tratativa, la DIA de Palermo interceptó algunas conversaciones de tipo social en un ambiente externo entre Salvatore Riina y su compañero de la hora de aire en Milán. Fueron frases relacionadas con la masacre de Capaci, cuando después de exaltar su habilidad para llevarla a cabo, le dijo a Lorusso que uno de sus compañeros de la comisión provincial, Totò Cancemi, le había preguntado, inmediatamente después de la masacre, qué debíamos decirle a nuestros compañeros mafiosos? Y Riina le dijo que debían callar, si no queremos que se termine Cosa Nostra. Así que el propio Riina murió con un secreto tan inconfesable que, incluso si hubiera sido confesado, habría significado el final de Cosa Nostra.
-No soy un magistrado, pero cuando empiezo a escuchar frases como operaciones externas, o Gladio, me hacen pensar que atrás podría haber un ministro con un segundo control remoto. Basta preguntarse quién hace este trabajo porque ha sido entrenado para hacerlo.
-Estos son campos de investigación muy delicados pero que deben abordarse. No podemos aceptar que desde hace años se diga que el capítulo de las masacres deba cerrarse desde el punto de vista judicial. Se han logrado excelentes resultados, ahora el 23 de mayo debe convertirse en un día de emoción y en el que se celebre la grandeza de Falcone. Bien, pero todavía tenemos que entender si hubo otros que contribuyeron a la masacre y sobre todo por qué fue asesinado. Otro dato a recordar es que la historia de Giovanni Falcone es una historia de continuas derrotas y, sobre todo, fue derrotado dentro del poder judicial, cuando tuvo que reemplazar a Antonino Caponnetto al frente de la oficina de instrucción de Palermo siendo candidato para el Consejo Superior de la Magistratura. Las peores deslegitimizaciones se desataron cuando Falcone comienza a pensar en convertirse en Fiscal Nacional Antimafia. El esquema es siempre el mismo. Los funcionarios víctimas, y Falcone es el prototipo, antes de ser asesinados o explotados y esto vale tanto para Falcone como para Borsellino, fueron aislados y difamados. Lo que nos enoja es que, incluso hoy, este esquema se reproduce cada vez que hay un personaje del Estado que está empezando a molestar y los que lo reproducen usan un sistema que es el de decir que Falcone y Borsellino nunca habrían hecho ciertas investigaciones o que perseguían quimeras. Lo que éticamente me indigna es que a menudo los que santifican a Falcone y Borsellino en la muerte son los mismos que lo atacaron en vida: son los que acusaron a Falcone de haber puesto la bomba él mismo, por su cuenta.
-¿Alguna vez ha sido víctima de este sistema de deslegitimación?
-No importa mi situación, no quiero hablar de ello. Hablo en general. Cada vez que se eleva la puntería, los investigadores o magistrados que lo hacen son acusados de delirios de protagonismo y objetivos políticos. Creo que en Italia todavía hay una parte de los cuerpos de investigación que no consideran cerrado ese capítulo y la política tampoco debería permitirlo, por el contrario, debería hacer que los magistrados e investigadores trabajen con el mismo despliegue de fuerzas que lo hicieron después de las masacres. Incluso la política podría hacer su parte, con la Comisión Parlamentaria Antimafia. Se podría abrir una investigación política para dar respuesta a los interrogantes y esto también podría ayudar al poder judicial.
-¿No cree usted que es una excusa de la política y, por lo tanto, del Estado utilizar la famosa frase: "de eso se está ocupando el poder judicial"?
-Estoy totalmente de acuerdo. Creo que la política en general no puede renunciar a su papel propulsor en la lucha contra la mafia y la búsqueda de la verdad. No se puede decir que hay que esperar al poder judicial, basta pensar en el hecho de que mientras los jueces, ciudadanos indefensos, saltaban por los aires, había una parte del Estado que iba a tratar con la mafia mientras había otra que arriesgaba sus vidas, exponiéndose al buscar la verdad.
-De aquella generación de corleoneses guiados por Totò Riina todavía está libre Matteo Messina Denaro, fugitivo desde hace muchos años y que probablemente esté al tanto de muchos secretos que podrían arrojar luz sobre el tiempo de las masacres.
-Pienso que sí. Creo que la era Corleone ha conluido definitivamente. Hay una generación de los años 50 y 60 que se resisten a la derrota. No debemos olvidar que Matteo Messina Denaro fue condenado en forma definitiva por las masacres del ‘93, y al leer las sentencias vemos que no tuvo un rol cualquiera. Fue uno de los creadores, sugirió los objetivos a golpear fuera de Sicilia, es un sujeto que no sólo tiene 4/4 de nobleza mafiosa, ya que es hijo de un jefe mafioso importante, sino que también es un sujeto que conoce los secretos de esas masacres totalmente anómalas en la historia de la mafia. Masacres en las que Cosa Nostra parece estar siempre dirigida hacia un objetivo político. Un hombre de ese calibre en posesión de sus facultades mentales que conoce esos secretos tiene el potencial para chantajear a partes del Estado. Por esta razón, su estado de fugitivo es realmente grave y debe ponérsele fin, para que no se genere la sospecha de que la inacción es el resultado de un chantaje del mismo.
-¿Y la protección?
-Nosotros, los magistrados, hemos lidiado con estos eventos durante décadas. Tal como sucedió con Bernardo Provenzano, está sucediendo con Matteo Messina Denaro. No se puede concebir una fuga tan larga solo por la habilidad del fugitivo. Hay una red de protección fuera de la mafia que protege sus escondites. Es por eso que la figura de este mafioso nunca debe ser subestimada, ya que sólo por esta razón, es sin dudas un conocedor de los secretos vinculados a la época de los atentados de los que fue protagonista.
Entrevista de Andrea Purgatori al periodista Saverio Lodato
-Saverio Lodato, usted comenzó en "L'Ora" de Palermo y fue corresponsal de l’Unità durante 35 años. La mafia corleonesa toma el poder, pero aunque es una mafia regional, de repente comprende que puede extender su poder a la política, las finanzas y las instituciones del país. ¿Fue Riina realmente capaz de hacer este diseño imperial?
-Totò Riina fue un líder extremadamente áspero y sanguinario pero que conocía perfectamente cuáles habían sido las relaciones de sus predecesores con las instituciones hasta ese momento. Una de las razones por las que Riina desata la guerra de la mafia no es sólo la diferente división del narcotráfico. Paradójicamente, por quererse valer de las relaciones de alto nivel que tenía un personaje como Stefano Bontate, es que el mismo fue asesinado dentro de su villa en su cumpleaños, porque era el hombre que tenía relaciones en nombre de la mafia con la masonería, los servicios secretos y otros aparatos desviados del Estado y del ejército. Totò Riina quiere heredar este poder que es indispensable para él en ese momento, porque una cosa es eliminar a quienes lo precedieron y otra distinta es administrar este poder y, de hecho, esto es lo que luego hará.
-¿Por qué los corleoneses decidieron ir a Palermo a fines de la década de 1960 y tomar posesión del territorio, en ese momento, de la mafia de la ciudad?
-Porque durante mucho tiempo los químicos de Marsella fueron los que refinaron el opio proveniente del triángulo dorado de Laos, Birmania y Tailandia. En cierto momento, la policía francesa pone en jaque a la mafia marsellesa dedicada al narcotráfico y decide transferir las refinerías a Sicilia y, sobre todo, a Palermo. En este punto, un enorme río de dinero comenzó a cruzar por Sicilia. Este es el momento en el que los corleoneses deciden desencadenar definitivamente su asalto al liderazgo de la Cosa Nostra de Palermo, históricamente representada por un jefe llamado Stefano Bontate.
-Cuando los corleoneses toman el poder en Palermo Tommaso Buscetta sigue siendo uno de ellos ¿qué sucede luego? Porque usted a Buscetta lo conoció, habló con él y lo entrevistó.
-Conocí a Buscetta en América unos meses antes de su muerte. Tommaso Buscetta fue el representante histórico de una mafia tradicional relacionada de alguna manera con la leyenda de que no era necesario matar mujeres y niños. Una mafia éticamente ecobiológica. Buscetta era un líder dotado de un extraordinario carisma dentro de la mafia palermitana, pero cuando estalló la guerra en Palermo, él estaba en Brasil y, por lo tanto, no pudo participar personalmente del ajuste de cuentas que se estaba llevando a cabo. La mafia que comienza a perder, la de los palermitanos, solicita su intervención y los corleoneses decidieron exterminar a toda su familia para impedir su regreso a Palermo. Fue entonces que Buscetta, que era una persona especialmente inteligente, toma una decisión inteligente, porque comprende que aunque regresara a Palermo no tendría los números para ganar una guerra de exterminio de ese tipo y entonces decide dar un paso diferente. Después de ver a toda su familia exterminada, decide comenzar su colaboración con Giovanni Falcone, porque reconoce en él al interlocutor y al magistrado que representa a un Estado italiano que realmente quiere librar una guerra contra la mafia. Y allí nacerá la relación que se ha contado muchas veces entre Giovanni Falcone y Tommaso Buscetta. El mismo maxi proceso de Palermo que había terminado en 1987 fue inicialmente rechazado en todos los sentidos por el poder romano porque hasta entonces, en 1987, con una mafia que ya existía desde hace más de 150 años, los mafiosos siempre habían sido absueltos por insuficiencia de pruebas, por no haber cometido el hecho o por errores materiales. Ya se habían celebrado dos juicios importantes con numerosos acusados, como el de Bari y el de Catanzaro en la década de 1970, pero todos habían sido absueltos porque hasta ese momento la lucha contra la mafia había sido llevada a cabo, aunque de manera voluntariosa, por hombres de la policía y de los carabineros que, en los informes que enviaban a la magistratura, acumularon una serie de rumores, sospechas y pistas que, sin embargo, nunca fueron suficientes para sostener la acusación. Con el maxi proceso todo esto viene a caer, pero incluso en esa fase hubo fuertes resistencias porque se dijo "¿por qué debe combatirse a la mafia con estos sistemas definitivos, con un maxi proceso?". Maxi proceso que se celebra en coincidencia con dos escenarios criminales paralelos. Una guerra mafiosa muy importante dentro de las pandillas por el territorio, pero también un desafío ya que, por primera vez, se dirige contra funcionarios de las instituciones.
-¿Por qué la masacre de Capaci no debe ser solo una conmemoración?
-Porque Giovanni Falcone no es una estatua o un monumento para ser homenajeado periódicamente una vez al año, lo hemos estado haciendo durante 27 años. Giovanni Falcone es la persona a quien le debemos ese poco de conciencia contra la mafia que existe en Italia. Porque siempre debemos recordar que la mafia en Italia existe desde hace casi 200 años, pero el Estado italiano de estos 200 años perdió al menos 170 negando la existencia del fenómeno mafioso, sin poder pronunciar la palabra mafia y sin siquiera saber cómo se llamaba exactamente. Fue gracias a Giovanni Falcone que pudimos saber que la mafia no se llamaba así sino Cosa Nostra. Así que la revolución que Giovanni Falcone introduce con su trabajo, el que no supera una docena de años desde el momento en que comienza hasta la masacre de Capaci, es una revolución que tiene que ver con la palabra y la cosa. Giovanni Falcone de alguna manera les abre los ojos a los italianos con respecto a un fenómeno con el que han vivido durante décadas y décadas sin comprender de qué se trataba. Desafortunadamente, esos ojos abiertos por Giovanni Falcone a lo largo de los años a menudo se han cerrado y hoy todavía estamos aquí, 27 años después, hablando sobre la mafia.
-Volvamos a Capaci. El fiscal Nino Di Matteo, de manera muy precisa y exacta, habla sobre posibles presencias externas, huellas dejadas en el lugar de la masacre que todavía no se entiende qué son exactamente y de dónde vienen y sugiere, de alguna manera, que había hombres de Cosa Nostra pero también otros y sobre todo dice algo fundamental y es que Capaci y Via d'Amelio no son dos cosas separadas del resto de las bombas, sino que son el primer acto de guerra que Riina decide hacer al Estado porque dice que "debemos hacer la guerra para poder hacer la paz". Y luego vendrá la tratativa, esas sospechas que se han dejado correr a lo largo de los años.
-No olvidemos que la masacre de Capaci es de 1992, y es la que abrirá el camino a lo que luego se refiere, porque después de Capaci vendrá Via d'Amelio, Roma, Florencia y Milán, e incluso antes de Capaci se produjo la masacre de Dalla Chiesa y Chinnici, cuando Giovanni Falcone todavía estaba vivo e investigaba esos grandes crímenes. Un tiempo antes de su muerte, Giovanni Falcone ve que la mafia que había empezado a conocer y descubrir como tal, en el transcurso de su trabajo se convierte en algo mucho más perturbador y alarmante.
-¿Es decir?
-Que no era sólo una potencia criminal que de alguna manera simplista se decía que le estaba haciendo la guerra al Estado, sino que era una mafia detrás de la cual el mismo Falcone, unos años antes de Capaci, advierte algunas presencias ocultas que sugieren que la misma es guiada y en cierto modo "encaminada" en sus pasos criminales.
-Giovanni Brusca, a quien ha conocido y entrevistado, cuenta los instantes de la masacre de Capaci como un momento en el que se dudaba que el atentado pudiera ser exitoso.
-La sensación que tenía Brusca era que alguien podría haberlo desposeído de ese momento cuando presionó el control remoto
-Sin embargo, dijo que había un "guardián" que tuvo el cuidado de asegurarse de que este ataque ocurriera en el momento que tenía que ocurrir.
-Y entonces tal vez haya habido otro control remoto efectivo y eficiente como el que operaba Brusca. Pero él (Giovanni Brusca, ndr) no dice esto directamente. Lo levanta, sugiere que algo no va como estaba previsto, y se pregunta por qué todo no va bien en ese momento. Como si hubiera habido un obstáculo antes o después, pero en ese momento hay algo como... ¿por qué el botón no responde a sus órdenes?
-Usted era amigo de Giovanni Falcone, existía esa relación de respeto mutuo. En cierto momento, tras el fallido ataque a Addaura, cuando circulan rumores de que incluso se lo hizo él sólo por su anhelo de protagonismo, se encuentra con él y durante esta reunión dice algo que permanece como un sello justo sobre lo que estamos discutiendo.
-Yo no voy al encuentro de Giovanni Falcone. Él me llama y me pide que lo visite porque quiere hablar conmigo. De alguna manera, podríamos decir que es una forma de convocatoria, quiere hablar con un periodista que, en ese momento trabajaba para l'Unità, era del mayor partido de oposición en Italia. Para alguien como Giovanni Falcone, que estaba muy atento a las relaciones institucionales y al papel del magistrado, ese fue un paso significativo, es decir, quería que todos lo supieran, incluso la oposición.
-¿Qué le dice?
-Dice que finalmente entendió que detrás de Cosa Nostra hay "mentes refinadísimas" que guían el juego de la mafia. Y ahí se detiene porque ese es el concepto importante que quiere expresar, pero agrega otro inmediatamente después.
-¿Cuál?
-Dice: "conmigo ha comenzado la misma campaña que se hizo con Dalla Chiesa" compuesta de amenazas, llamadas telefónicas anónimas, mafiosos asesinados y dejados frente a los cuarteles de los carabineros, encerrados en el maletero para decirle a Dalla Chiesa "vete, no te queremos". Así que Falcone inmediatamente después del concepto que expresa sobre "mentes refinadísimas" hace el paralelo con Dalla Chiesa. Es como si hubiera estado presenciando en vivo la ejecución que tendría lugar tres años después.
-¿Cómo lo encontró?
-Encontré a un Giovanni Falcone que no era un magistrado en el apogeo de su poder, sino un magistrado en la cima de su aislamiento. Giovanni Falcone ya había sufrido grandes derrotas dentro del Consejo Superior de la Magistratura, era el heredero designado para reemplazar a Antonino Caponnetto como jefe del pool antimafia de Palermo. El CSM votó contra Giovanni Falcone y fue denigrado y deslegitimado en todos los diarios durante un par de años por los ataques concéntricos provenientes de una parte de la magistratura, de los grandes diarios y principalmente de los abogados de los mafiosos de Palermo. Se lo describe como un "Nembo Kid" (personaje de historieta italiano, ndt) que había decidido derrotar a la mafia. La expresión "Nembo Kid" ya había sido usada diez años antes también para Dalla Chiesa y él también tuvo el mismo final que Giovanni Falcone. Me encontré frente a un hombre que sabe que está representando a un Estado que no lo protege. Y no sólo Giovanni Falcone, sino también Paolo Borsellino, porque son dos historias paralelas de esos años, son dos magistrados que por primera vez presentan a los mafiosos el rostro de un Estado respetable y limpio que quiere luchar contra la Mafia, que no quiere tratar, que quiere vencerlos en la medida de lo posible. El punto es, sin embargo, que el Estado no los respaldó.
-Cuando le dice la frase "mentes refinadísimas" ¿qué entendió?
-Traté de hacerle preguntas a Giovanni Falcone, pero él era un hombre que si no quería responder a una pregunta no respondía. Sin embargo, me dejó entender que incluso las controversias que se remontaban a tres semanas antes y que lo habían preocupado tenían que ver con las "mentes refinadísimas" y esas controversias se referían al hecho de que si revisamos los periódicos de un mes antes del ataque en Addaura, vemos que se puso en marcha una gran campaña venenosa en la que se afirma que Giovanni Falcone, junto con Gianni De Gennaro, quien luego se convertiría en el jefe de la policía en Italia, había autorizado, con la complicidad de los Estados Unidos de América, el regreso a Italia de Buscetta para actuar militarmente contra el frente corleonés y liquidar cuentas con ellos. Se lo quiere deslegitimar, hacerlo pasar por alguien que entró en el juego de disputas de la mafia. No olvidemos que si bien Giovanni Falcone dijo que había "mentes refinadísimas" al mismo tiempo, sin embargo, supuso que la mafia, como todas las cosas en la vida, había tenido un principio y estaba destinada a tener un fin, porque estaba convencido de que al continuar investigando, en algún punto, la organización se habría derrumbado y rendido. Y sentía que se estaba acercando a eso. Después del '92 comienza la gran temporada del juicio de Andreotti, un proceso que duraría 7 años. Todo lo que se dijo sobre la celebración de Falcone y Borsellino en esos años, debe volver literalmente a cero, lo sé porque lo viví como corresponsal de la l’Unità en Sicilia y seguí el juicio de Andreotti todos los días. Se había desatado una campaña que tenía dos objetivos, el fiscal de Palermo de esa época que investigaba a Giulio Andreotti por un lado y los arrepentidos de la mafia por el otro. Es significativo que el presidente de la Comisión Antimafia de esos años, Ottaviano Del Turco, durante todos los años en que fue presidente, dedicó el 100% de sus declaraciones a atacar por un lado a los fiscales de Palermo y por el otro a la mafia arrepentida. Creo que no existen declaraciones suyas contra los mafiosos que en ese momento se sabía que estaban en el vértice de Cosa Nostra, salvo para decir que en cierto momento el Estado se retiró, que había digerido mal el juicio y las condenas de los mafiosos. Pero en el momento en que alguien se engaña puede elevar el listón y, sobre todo, se propaga el terror de que al arrepentido se le dé permiso para hablar, no solo de sus asociados criminales sino también de las relaciones políticas que la mafia había tenido abundantemente y el propio Falcone lo sabía muy bien. Y no es una coincidencia la primera gran temporada del maxi proceso, el nivel militar Andreotti y luego la tratativa Estado-mafia. Es decir, el nivel se ha elevado, se entendió que era lo que estaba detrás de la mafia y está claro que no se trata de masacres realizadas exclusivamente por villanos con kalashnikov y gorras torcidas, como se los representaba.
-¿Como Gladio por ejemplo?
-Incluso Gladio. Falcone se dedica a Gladio en el último período de su vida y también al terrorismo negro y rojo. Falcone, en algún momento, entiende que detrás de la palabra mafia en realidad hay una serie de cables que son mucho más complejos y de gran entidad. Giovanni Falcone entiende esto y esa es la razón por la que Falcone debe morir, y no sólo porque se permitió desafiar al brazo militar de la mafia, que en cualquier caso sigue siendo su mayor éxito, después del procesal y el judicial. Lo único que puedo decir claramente, después de haber tratado este tema durante más de treinta años en Sicilia, es que el gran cuento de hadas ha terminado. Nunca ha habido una mafia opuesta al Estado y viceversa. Si eso hubiera sucedido, Giovanni Falcone se habría salvado y, sobre todo, 57 días después de la masacre de Capaci, Paolo Borsellino no pudo haber tenido el mismo fin, así que yo, y no solamente yo, probablemente la misma magistratura ya ha comenzado a entender que todo lo actuado fue una representación de cuento de hadas del Estado y de la mafia.
-De esa cúpula mafiosa de los corleoneses de los atentados aún queda un gran fugitivo como Matteo Messina Denaro ¿existe la hipótesis de que nadie lo encuentra porque se tiene la certeza de que mientras sea un fugitivo no puede revelar las cosas que sabe?
-Matteo Messina Denaro era un hombre de confianza de Totò Riina, que conocía a su padre y que también murió como fugitivo. Matteo Messina Denaro es quien realiza las inspecciones de las masacres de Capaci, de Via d'Amelio, Roma, Florencia y Milán. Es el hombre que Totò Riina manda por primera vez a Roma, cuando se estudiaba la hipótesis de matar a Falcone en la capital y luego lo llama a Palermo para que lleve a cabo el ataque en esta ciudad. Matteo Messina Denaro es la expresión de estos últimos 30 años de historia de la mafia. De una mafia que, en todos los casos, durante esos años se la mostró como opuesta al Estado, pero no ha sido así. Matteo Messina Denaro conoce y también ha heredado los secretos de Totò Riina; no olvidemos que hay una guarida de Riina que no fue registrada durante dieciocho días, que hay un archivo de Totò Riina que ha desaparecido y que Giovanni Brusca contó cómo tuvieron la oportunidad quince días después de entrar en la casa donde Riina había vivido, aunque éste ya había sido arrestado. Así que él es el heredero de esa antigua mafia, pero también de la mafia que se ha renovado y reciclado. ¿Es posible que hoy, en el 2019, una persona pueda desaparecer en la nada durante 27 años? La población entera de Castelvetrano ha sido rastreada por investigadores en los últimos 10 años y cada vez las pistas de Matteo Messina Denaro desaparecen. Si se hubiera buscado a tierra arrasada en Sicilia, como parece haberse hecho, con mayor razón la fuga no podría continuar hasta el infinito. Tengo la sensación de que tuvo la oportunidad de disfrutar de una complicidad de muy alto nivel y aquí la referencia es para todos los entornos que podrían sentirse chantajeados por una posible captura de Matteo Messina Denaro. Pensemos también que cuando se capture a Matteo Messina Denaro, se abre un problema de gestión, no sabemos qué decidirá hacer Matteo Messina Denaro, el tema se puede volver mucho más engorroso y riesgoso de manejar. Así que creo que en este momento hay muchos entornos que lo protegen y no necesariamente mafiosos.
-Y no necesariamente en Sicilia.
-Sin embargo, creo que la gran madre de todos los procesos, incluyendo los de las masacres, es la de la tratativa Estado-mafia. Porque si la sentencia de este proceso se convirtiera en la palabra definitiva de la justicia italiana sobre lo que sucedió entre el ‘90 y el ‘94 en Sicilia, se podrían reabrir una serie de preguntas y se podría buscar no sólo a los perpetradores materiales que hasta ahora han sido llevados ante la justicia en gran cantidad, sino sobre todo a aquellas otras figuras que permanecen en las sombras.
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*Foto de Portada: www.antimafiaduemila.com
*Foto 2: Atlantide-ADuemila/Periodista Purgatori y Antonino Di Matteo
*Foto 3: www.antimafiaduemila.com /Masacre de Capaci
*Foto 4: Atlantide-ADuemila/ Antonino Di Matteo
*Foto 5: Atlantide-ADuemila/Giovanni Brusca
*Foto 6: Atlantide/ Periodista Purgatori y Antonino Di Matteo
*Foto 7: ADuemila/ Giovanni Falcone,Paolo Borsellino y Caponetto
*Foto 8: Atlantide-ADuemila/ Saverio Lodatto
*Foto 9: Atlantide-ADuemila/ Periodista Purgatori y Saverio Lodatto
* Foto10 : ADuemila/ Reporta Gráfica Lettizia Bataglia
* Foto 11: ADuemila/ Guarnotta