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berlusconipide2bDRAMÁTICO PEDIDO DE APOYO DE BERLUSCONI
Llamó a los "moderados" en el Parlamento a votar a favor de su gobierno para evitar una "locura"; denuncian la compra de votos
Martes 14 de diciembre de 2010 | Publicado en edición impresa
Dramático pedido de apoyo de Berlusconi
Berlusconi habló ayer en las dos cámaras del Parlamento y llamó a evitar una crisis política; se mostró confiado y tendió una mano a los "moderados".
Elisabetta Piqué
Corresponsal en Italia
ROMA.- Máxima tensión, suspenso, denuncias de compra y venta de votos de diputados, tratativas secretas y frenéticos recuentos de parlamentarios indecisos y ausentes. Este clima al rojo vivo se vivió ayer en Italia, donde Silvio Berlusconi se juega hoy su futuro en una votación de confianza en la Cámara baja. Todo indica que su gobierno podría salvarse, pero por uno o dos votos.
Tal como prevén los rituales del sistema parlamentario italiano, el primer ministro se presentó ayer ante las dos cámaras del Parlamento. Allí, en un último esfuerzo por salvar su pellejo, en discursos en los que trató de mantener el perfil bajo y un tono persuasivo, dijo que sería una "locura" llevar al país a una crisis y propuso "un nuevo pacto de legislatura de todos los moderados" para relanzar su gobierno y abrir una "fase política nueva".
"Es el momento de la responsabilidad", clamó Berlusconi, que se mostró confiado en que hoy superará la prueba de fuego. "Necesitamos de todo salvo una crisis en la oscuridad", dijo el premier, de 74 años, golpeado por diversos escándalos de tipo sexual y de corrupción y al borde de la cornisa desde que rompió con su ex aliado y ahora principal enemigo Gianfranco Fini.
El actual presidente de la Cámara de Diputados, que fue expulsado del Partido del Pueblo de la Libertad (PDL), que cofundó junto a Berlusconi, creó un partido rebelde, Futuro y Libertad para Italia (FLI), que cuenta con 10 senadores y 34 diputados cuyo voto hoy resulta decisivo.
A ellos pareció dirigirse Berlusconi, que en sus discursos usó la palabra "responsabilidad" unas diez veces. "No se puede traicionar el mandato de los electores", reiteró una y otra vez el premier, que se presentó muy sereno y seguro de sí mismo ante la Cámara de Diputados, donde el éxito de la votación de hoy seguía siendo un gran interrogante. En el Senado, en cambio, se descuenta que superará sin problemas la moción de desconfianza.
Aludiendo a su pelea a muerte con Fini, tras recordar "todas las cosas buenas" y demás resultados positivos alcanzados hasta ahora, Berlusconi subrayó que "las divisiones internas no son insuperables".
"Tiene que prevalecer el sentido de responsabilidad: nuestro pueblo no nos pide la división, sino la unión por el bien de Italia", arengó. En una clara estocada a su ex aliado Fini, que anteayer tiró por la borda cualquier hipótesis de arreglo de último momento, el premier sentenció: "Nadie puede ser tan irresponsable de destruir la unidad de los moderados".
En su llamado a un nuevo "pacto" de los moderados, el premier pareció también hacerle un guiño al líder centrista y católico Pier Ferdinando Casini, líder de la Unión del Centro (UDC).
"Trabajaremos para reforzar el equipo de gobierno", adelantó el premier, abriendo la posibilidad a un recambio ministerial y a una ampliación de la mayoría de gobierno. "Estoy convencido de que al final la razonabilidad y la responsabilidad les ganarán a la irrazonabilidad y a la irresponsabilidad. El bien común debe prevalecer", agregó, mientras se oían silbidos y abucheos desde las bancadas de la oposición.
Compra y venta de votos
La sesión tuvo lugar en un clima de lo más agitado debido a las acusaciones de una vergonzosa campaña de compra y venta de diputados por parte del PDL. Ayer, por segunda vez en pocos días, el ex fiscal anticorrupción Antonio Di Pietro volvió a presentarse ante la fiscalía de Roma para presentar supuestas pruebas de este comercio de votos.
"Hemos indicado hechos y circunstancias, así como el nombre de los mandantes", indicó Di Pietro, que perdió a dos diputados de su partido Italia de los Valores (IDV), que repentina y sugestivamente decidieron pasar del lado de Berlusconi. En los diarios italianos se ha denunciado la existencia de un tarifario que va de los 250.000 a los 500.000 euros, el pago de una hipoteca o la promesa de un cargo a cambio del voto en favor del Cavaliere .
Un diputado que pidió el anonimato afirmó a La Nacion que recibió una oferta aun mayor: 1 millón de euros, más un importante puesto en una lista electoral, para pasarse del lado de Berlusconi. Anoche, cuando faltaban pocas horas para el voto crucial, los principales actores de este duelo -Berlusconi y Fini- tuvieron sendas cenas para alistar a sus respectivas tropas para la batalla final. Luego de una jornada de tensión y gran dramatismo, hoy el escenario estaría aún más candente.
Además del suspenso por el voto, se esperan masivas protestas de sectores furiosos con el gobierno de Berlusconi, "decididos a censurar al gobierno desde abajo", según el lema de la convocatoria.
Llegarán a la capital otra vez miles de estudiantes (en rebelión desde hace semanas por una controvertida reforma universitaria), napolitanos (que protestarán por la crisis de la basura) y gente de L'Aquila, la zona golpeada hace un año y medio por un terrible terremoto, que espera la reconstrucción de su ciudad. Por eso, el centro histórico fue declarado inaccesible para los manifestantes.
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1333372

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