El consejero del CSM comentó las medidas previstas por el gobierno
Por Antimafia Mafia Duemila -21 de octubre del 2019
"Si el verdadero objetivo" de la disposición que prevé el encarcelamiento de quienes evaden más de 100 mil euros "es la lucha contra la evasión fiscal, la posibilidad de prisión – que ha caído en el sistema penal italiano – no creo que sea la solución". Así se expresó el consejero del CSM (Consejo Superior de la Magistratura) Sebastiano Ardita en una entrevista publicada en Adnkronos, sobre las medidas expuestas por el gobierno en el decreto fiscal".
"El número de evasores fiscales en nuestro país se cuentan por millones, e incluso si sólo una fracción alcanzare el umbral del castigo, sería impensable que alguna vez se pudieran abrir las puertas de un centro penitenciario – explicó –. El único efecto cierto es la parálisis del sistema penal que sería envuelto por un río de procesos que producirían sentencias teóricas de prisión: es decir, sanciones que permanecen suspendidas o deben convertirse en medidas alternativas".
Según el magistrado "la medida más adecuada en estos casos y también la más rentable para el tesoro público podría ser la confiscación, previendo tal vez un procedimiento ágil y acelerado, que agilice la recuperación de las sumas sustraídas al fisco". Ardita luego comentó sobre las palabras del ex ministro y líder de la Liga Matteo Salvini, según el cual "pensar en las esposas por algunas decenas de miles de euros está fuera de su mente. Sí a la cárcel pero no para los desesperados". Mientras que para el fiscal "los evasores de impuestos por encima de un umbral de ingresos significativo ciertamente no están desesperados, es igualmente cierto que la prisión podría ser una medida ‘coherente’ sólo en un sistema con castigo efectivo, como el estadounidense. En nuestro país, quienes dañan bienes personales relevantes a menudo permanecen en libertad y, por lo tanto, debe mantenerse un criterio de proporcionalidad de conformidad con los valores de la Carta Constitucional". Ardita continuó: "En Italia, la prisión sólo se puede considerar como un remedio para un delito financiero importante, especialmente cuando este último se injerta en el ámbito del crimen organizado, es decir, en un marco en el que el delito fiscal es parte de un programa criminal que prevé roles y participaciones para llevar a cabo una serie indeterminada de delitos – dijo también Ardita – para desmantelar una organización, entonces podría tener sentido recurrir a la medida de detención. Pero me refiero a casos que no se reflejan en el fenómeno individual y generalizado en el que la reforma parece estar inspirada”.
El consejero del CSM al hablar después de las declaraciones del ministro Luigi Di Maio según las cuales "la cárcel para los grandes evasores es esencial", sostuvo que "con la sensibilidad que está presente en nuestro país y con el sistema de medidas alternativas, mayor será el número de juicios y sentencias y más bajo será el porcentaje de convictos que cruzarán el umbral de la cárcel. Y así – concluyó – esto seguirá siendo sólo un propósito".
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