Pin It

Entrevista* a Egidia Beretta, madre del activista italiano asesinado en la Franja de Gaza

Por Karim El Sadi– 15 de abril del 2020

"Sigamos siendo humanos". Con estas dos palabras, Vittorio Arrigoni, "Vik"para sus amigos, terminaba los videos, reportajes y los artículos que escribía a mano desde la Franja de Gaza, ese pedazo de tierra olvidado por el mundo por el cual decidió sacrificarse a principio de los años 2000. Su lema fue adoptado por quienes llevan en el corazón los derechos humanos, la defensa de los postergados y de los oprimidos. Vittorio Arrigoni fue un joven fuerte, humilde y valiente que había hecho del amor su razón de vivir desde que era niño. "Debemos seguir el camino del amor, la vía más justa que nos impulsa a morir por la salvación de los demás", dijo cuando todavía estaba en quinto grado.

Con motivo del noveno aniversario de su muerte, entrevistamos a su madre, Egidia Beretta, una mujer de gran espíritu y fuerza de voluntad, para que nos cuente un poco sobre cómo era la vida de su hijo, un ganador "que vino al mundo con el puño cerrado en alto".

"Blanco como el detergente vertido en los ríos. Gris como el aire contaminado. Negro como la ira de los hombres que hacen la guerra. Verde como los árboles que están desapareciendo. Rojo como el sol del pasado. Amarillo como las monedas que sueñan los pobres y que se gastan en bombas". Vittorio tenía solo once años cuando, en 1986, escribió este poema titulado "Con los ojos de un niño": un escrito que denota su visión lúcida del mundo a una edad temprana, ciertamente debida a una educación basada en sólidos principios. ¿Quién fue Vittorio Arrigoni de niño y de joven?

-Un niño que a los once años escribe estas palabras seguramente es un niño que ya diferenciaba lo justo de lo injusto, que ya entendía que la ira de los hombres causaba las guerras, y que el dinero no se gastaba en los pobres, pero sí en bombas. Era un niño reflexivo, pero por lo demás era como todos los demás: estudiaba, le gustaba ir a la escuela, jugaba. Tenía una sensibilidad particular, tal vez debido al hecho de que en casa se hablaba de todo esto y, por lo tanto, probablemente meditó sobre estas cosas y las tradujo a esos versos que asombran si se los vuelve a leer. Pero eso, en el fondo, no hace más que demostrar que Vittorio ya sentía en su corazón cuál era el camino correcto.

VITTORIO ARRIGONI 2

A principios de los noventa comenzó sus viajes como activista y pacifista en muchos países del mundo: Perú, Congo, Croacia, República Checa, Polonia, Togo... ¿Qué le dejaron estas experiencias?

-Vittorio hizo todos estos viajes y estos trabajos de campo internacionales al principio, y sobre todo, para ir en busca de sí mismo, es decir, de la vida. Vittorio creía que esta vida, que no había pedido, pero que le había sido dada, merecía ser vivida de una manera digna. De hecho, con estos trabajos de campo trajo a casa nuevas experiencias y conocimientos, incluso de personas nunca vistas o conocidas, excepto a través de los libros. La experiencia de conocer a muchas personas y a muchos jóvenes que encontró en esos mismos trabajos de campo, y cuyo intercambio nunca se detuvo, hecho de conocimiento, de amistad y de afecto.

Luego viene Palestina. ¿Qué lo hizo enamorarse de Tierra Santa? ¿Qué leía en sus ojos cuando hablaba de Palestina y de los palestinos?

-Aquí vuelvo nuevamente a Vittorio cuando era niño, cuando escribió: "Para querer la paz tengo que mirar a mi alrededor. Para ver si todos tienen lo que necesitan, la alegría de vivir, la libertad de hablar, trabajar, rezar, amar, como yo, que tengo todas estas cosas y vivo bien todos los días". Vittorio, en Palestina, encontró precisamente eso: un gran deseo de libertad, de vivir la vida sin restricciones, sin injusticias... Él, que creía que la libertad era el mayor bien para cada hombre, encontró en Palestina y en los palestinos esas ansias de libertad y de vivir en su propia tierra sin opresiones, sin injusticias, y por eso era inevitable que se enamorara de Palestina y de los palestinos. Sintió en ellos las mismas cosas él sentía.

VITTORIO ARRIGONI 3

Durante su estadía en Gaza, su hijo brindó un fuerte apoyo, tanto físico como moral, a la población más pobre de la Franja afectada por el embargo israelí: de granjeros a pescadores, hasta familiares de las víctimas de los crímenes israelíes. Una misión de gran coraje que repetidamente lo expuso a grandes riesgos. ¿Cómo vivió todo esto desde Italia?

-Al principio no había grandes peligros. Vittorio nos contó, y también lo vimos en sus videos, el trabajo que hizo con los pescadores palestinos y con los agricultores palestinos en la frontera. Para él, era perfectamente normal lo que estaba haciendo, no podría haber hecho otra cosa. Por supuesto, cuando llegó a Gaza a fines del 2008 y fue secuestrado y encarcelado por los israelíes, teníamos miedo. Pero Vittorio nos tranquilizó, diciendo que estaba bien, que sentía que ese era su lugar y se dedicó con toda su fuerza física, tanto de corazón como de cabeza, a lo que se había convertido en su misión. Y eso básicamente nos tranquilizó, porque lo vimos y lo sentimos sinceramente sereno y, por lo tanto, entendimos que era correcto que estuviera allí en esos momentos.

Además de sus acciones de resistencia no violenta, Vittorio fue también escritor, poeta y crítico. Hizo un gran trabajo de reportajes. Durante la sangrienta operación militar israelí "Plomo Fundido", del 2008, su hijo fue el único periodista occidental que denunció, desde el lugar, la masacre de civiles palestinos por la fuerza aérea israelí. En un mundo donde la comunicación se uniforma cada vez más ¿cuán importante fue su testimonio contra la corriente?

-Su testimonio demostró ser muy importante, porque durante "Plomo Fundido", cuando Il Manifiesto llamó a Vittorio para saber si estaba dispuesto a contar lo que estaba sucediendo desde el lugar, entendió que su misión, en esos días, era esa. Luego escribió crónicas empáticas y dolorosas, pero básicamente también llenas de esperanza y de críticas contra este mundo occidental que había cerrado sus ojos y sus oídos. Fue realmente un grito que llegó hasta nosotros y el propio Vittorio me escribió que su blog, "Guerriglia Radio", en ese mes de enero durante "Plomo Fundido" fue el más visitado de toda Italia. Por lo tanto, Vittorio fue verdaderamente un campeón en esto: no tenía escrúpulos ni dudas al sostener la pluma en sus documentales. Mi hijo no se consideraba periodista, pero decía haberse convertido en periodista por accidente y por deber. Su trabajo les abrió los ojos a muchos sobre la situación en Palestina, en particular en ese período en Gaza y, por lo tanto, creo que debemos agradecerle también por esto. Luego quiero informar lo que Vittorio, sobre periodismo, dijo cuando fue entrevistado por una chica que le preguntó cómo se debería hacer el periodismo. "Nada de trucos baratos. Dilo claramente, dilo ahora", fue su respuesta. Este era un poco su lema cuando escribía.

VITTORIO ARRIGONI 4

En uno de sus informes, un cirujano de Gaza se dirigió a Vittorio diciéndole que la vida de los animales, a los ojos del mundo, valía más que la de los palestinos. En su opinión ¿sigue siendo una visión actual o algo ha cambiado en los últimos años? ¿Cómo ve la situación hoy en Gaza, con la marcha del retorno?

-Creo que te refieres a esa terrible pieza que Vittorio escribió en uno de sus informes cuando un médico le hizo esa comparación entre las vidas de los gatitos y las de los palestinos. Pienso que incluso hoy Israel considera poco o muy poco la vida de los palestinos, incluso después de todos estos años. Creo que, si Vittorio aún hubiera estado en Gaza durante la marcha del retorno, habría estado con los palestinos, porque después de todo ¿qué querían los palestinos con esa marcha? Querían que la mirada del mundo no se apartara de su sufrimiento, de ese cruel embargo que los afecta desde hace 13 años. Así que creo que él habría apoyado la marcha y, sobre todo, creo que la habría documentado ya que sabía cómo hacerlo, con palabras y videos.

Muchos conocen la frase emblemática de Vittorio "Sigamos siendo humanos", que también es el título de uno de sus libros, pero no todos saben cómo era su vida. ¿Qué volumen recomendaría a cualquiera que desee conocer su legado?

-Definitivamente "Franja de Gaza. Sigamos siendo humanos" porque allí está todo. Y luego recomendaría el libro que escribí "El viaje de Vittorio" en el que vuelvo a recorrer su vida desde la infancia y sus experiencias de viaje donde están los correos electrónicos que me envió desde Gaza. Esta es también una forma de conocer su alma más profundamente y comprender cómo se convirtió en lo que todos conocemos, en el Vencedor de Palestina y, aún más, el Vencedor de Gaza. Después está también ese hermoso libro escrito por Stefano Piccoli, un cómic "Guerrilla Radio. Vittorio Arrigoni, la posible utopía", y también recomiendo visitar el sitio www.fondazionevikutopia.org  que creamos después de su asesinato, donde hay otros testimonios y escritos. Para los que prefieren la red, hay mucha información y videos sobre él.

VITTORIO ARRIGONI 5

¿Qué consejo les daría a los jóvenes para mantener vivos sus ideales y continuar sus pequeñas batallas, a su manera?

-A Vittorio le gustaba mucho investigar, profundizar situaciones, leer y viajar. Debemos saber cómo indignarnos ante la injusticia, el abuso, tomar en serio las vidas de los hombres y convertirnos en partisanos, en el sentido más noble de esta palabra. Partisano significa "yo participo". Vittorio pudo elegir y participar. Pero lo hizo después de experiencias que lo llevaron en esa dirección, la de convertirse en un hombre que realmente supo, cuando tuvo una oportunidad, elegir de qué lado quedarse y dedicar su vida a esa parte de la humanidad que más sufre.

En una histórica entrevista con Al Jazeera, su hijo dijo: “Yo, que no creo en la guerra, no quiero ser enterrado bajo ninguna bandera. En todo caso, quiero ser recordado por mis sueños. Si debiera un día morir, en cien años, me gustaría que sobre mi lápida fuese escrito lo que Nelson Mandela dijo: "un ganador es un soñador que nunca ha dejado de soñar". Vittorio Arrigoni, un ganador". A 9 años de su desaparición diría que podemos compartir, con fuerza, esta afirmación. Su hijo es un ganador...

-Sí, Vittorio es un ganador. Y grabamos esas palabras en su lápida. Los que van al cementerio a saludarlo, la encontrarán allí, escrita debajo de su fotografía. Espero que su mensaje llegue a muchas personas y se convierta en un camino para aquellos que desean vivir una vida digna de solidaridad y salvación. Porque salvando a otros nos salvamos a nosotros mismos.

-------------------

*En colaboración con: facebook.com/giovanipalestinesi.italia 

*Extraído de: ourvoice.it

*Foto de Portada:

*Foto 2: La llegada de Vittorio a la Franja de Gaza a bordo de una embarcación de la Freedom Flottilla

*Foto 3: Bombardeos israelíes con fósforo blanco sobre civiles durante la operación "Plomo Fundido" - De theguardian.com © Mohammed

Abed / AFP / Getty Image

*Foto 4: Egidia Beretta, la madre de Vittorio

REDACTORES

anna.jpgbgeorges.jpgbgiorgio.jpgbjuan.jpgblorenzo1.jpg
Copyright (c) 2009. Antimafia Dos Mil Argentina