Los jefes mafiosos expresan su descontento por los episodios del programa “Non é L’ Árena”
Así lo revela el último libro de Lirio Abbate en el informe del GOM
Por AMDuemila-14 de julio del 2020
"Ese hombre... de Giletti y ese... de Di Matteo están rompiendo la pija". Quien lo dice es Filippo Graviano, hermano de Giuseppe, también detenido bajo el régimen del 41bis, el 11 de mayo pasado mientras comentaba negativamente el episodio del programa "Non è l’Arena", dirigido por Massimo Giletti, emitido la noche anterior. El programa había tratado el tema de la excarcelación de los jefes mafiosos a causa del Covid-19 y, posteriormente, el del fallido nombramiento de Nino Di Matteo como jefe del DAP, por parte del Ministro de Justicia, Alfonso Bonafede.
"El ministro hace su trabajo y ellos rompen la...", dijo Graviano mientras hablaba en voz alta con el 'Ndranghetista Maurizio Barillari, como si quisiera ser escuchado por los hombres de GOM que lo vigilan. Quien reveló esta circunstancia fue el periodista Lirio Abbate, subdirector de L'Espresso en un libro de investigación titulado U Siccu "Matteo Messina Denaro: el último jefe de jefes" (Rizzoli), desde hoy en las librerías. La noticia fue reportada hoy por el diario La Repubblica.
Por lo que se desprende de los informes del GOM, a Giuseppe Graviano, detenido bajo el 41 bis en Terni, no le gustó lo que dijo el periodista de L’Espresso durante el episodio del 10 de mayo del programa de Giletti, quien habló precisamente de los hermanos de Brancaccio.
"Desafortunadamente, esto es Italia, los políticos y los magistrados pelean por sus trampas y hacen leyes restrictivas -escribe Giuseppe Graviano, el día después del episodio, a su esposa Rosalia Galdi- todo para ocultar sus malos negocios, contra quienes están restringidos, como la polémica de estos días, que ha puesto, como siempre, mi nombre que no tiene nada que ver con eso". Los agentes de GOM también informan que esa noche "del 10 de mayo, casi todos los reclusos bajo el régimen del 41 bis estaban frente al televisor".
En el informe también se puede leer acerca de los insultos dirigidos a la hija del general Carlo Alberto dalla Chiesa, Rita, quien muchas veces fue invitada al programa de Giletti. Los insultos provienen del jefe de la Comisión de Cosa Nostra Benedetto Capizzi, quien comentó negativamente las opiniones expresadas por dalla Chiesa. Y no sólo eso. Habló también contra los periodistas: "Es su culpa, si no, a esta hora yo también estaría fuera".
El último libro del periodista tiene como tema central al fugitivo de Castelvetrano, Matteo Messina Denaro, que está oculto desde junio de 1993.
Sin embargo, en todos estos años, ha sido juzgado y sentenciado a cadena perpetua por las masacres de Florencia, Milán y Roma. "La mafia sigue viva incluso si está tras las rejas –dice Abbate- y sus hombres intentan, por todos los medios, salir, comunicarse con el mundo exterior. Y afuera, el faro es sólo uno, el único que tiene el poder criminal y el calibre para actuar como punto de referencia: Matteo Messina Denaro". Según el periodista Messina Denaro es hoy un hombre de negocios que cuenta con "redes políticas, comerciales y criminales que trabajan para él".
Abbate, tratando de reconstruir el identikit del jefe de las masacres, encontró la primera y única acta de interrogatorio que data del 30 de junio de 1988. "Soy el cuarto de los seis hijos de Messina Denaro, Francesco -les dijo a los policías- el único que ha continuado con la actividad de mi padre dedicada al cultivo de los campos. Comenzó como agricultor en las tierras de la familia D’AlìStaiti –explicó- y hace tres años me hice cargo yo".
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*Foto de Portada: ANTIMAFIADuemila