La Cámara de Casación, máximo tribunal penal del país, deberá resolver si concede la excarcelación a Julio Poch, procesado con prisión preventiva como supuesto tripulante de los "vuelos de la muerte" desde donde se arrojaban secuestrados al Río de la Plata en la última dictadura.
Los planteos se dirigen "contra un decisorio equiparable a definitivo, pues el auto impugnado restringe la libertad del encausado con anterioridad al fallo final, ocasionando un perjuicio de imposible reparación ulterior, por afectar un derecho que requiere tutela inmediata", explicaron los camaristas de la sala I de la Cámara Federal, Martín Irurzun y Eduardo Farah.
Poch tiene procesamiento confirmado como "partícipe necesario" en 29 casos de privaciones ilegales de la libertad, por presuntamente haber intervenido "en los traslados de personas ilegalmente privadas de su libertad" en el centro clandestino de detención que funcionó en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).
El ex marino había sido apresado y liberado en una ocasión, pero el juez federal Sergio Torres volvió a detenerlo y procesarlo con nuevas evidencias y la Cámara Federal confirmó la decisión.
Poch trabajaba como piloto para una línea aérea en Holanda pero fue detenido luego que compañeros de trabajo revelaron que se jactaba de haber estado en los llamados "vuelos de la muerte".
El ex marino fue detenido en España a pedido de la justicia argentina cuando llegó a ese país en una escala de un vuelo de la línea aérea para la que trabajaba y se lo extraditó al país.
El ex piloto naval está preso en la cárcel de Marcos Paz y procesado por "privación ilegítima de la libertad y torturas seguidas de muerte".