martes 7 de agosto de 2012
MADRID (Reuters) - Muchas de las principales farmacéuticas en la conflictiva Siria han cerrado, lo que ha ocasionado una grave escasez de medicinas para tratar enfermedades crónicas y a un creciente número de heridos, dijo el martes la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Antes de la revuelta de 17 meses contra el presidente Bashar el Asad, Siria producía el 90 por ciento de sus fármacos, pero la producción se ha visto golpeada por los combates, la falta de materias primas, el impacto de sanciones y el encarecimiento de los combustibles, dijo la agencia de la ONU.
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