24 de Noviembre
Los militares que gobiernan en Egipto descartaron aplazar las elecciones legislativas del lunes pese a la reciente ola de protestas, y rechazaron la exigencia de sus miles de detractores de renunciar de inmediato y traspasar el poder a una administración civil.
En conferencia de prensa en el primer día de relativa calma después de cinco jornadas de violenta represión en El Cairo, generales de la Junta dijeron que renunciar ahora equivaldría a una "traición" de la "confianza" que el pueblo depositó en ellos al asumir tras el derrocamiento del ex presidente Hosni Mubarak.
El segundo miembro del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, general Mukhtar el-Mallah, dijo que dimitir ya sería "una traición a la confianza depositada en nuestras manos" y agregó que las multitudes que protestaron en la plaza de El Cairo no representan a la mayoría de la población.
"No cederemos el poder por el hecho de que haya una multitud que canta consignas. Estar en el poder no es una bendición. Es una maldición. Es una responsabilidad muy grande", dijo el-Mallah, citado por la cadena de noticias CNN.
Más temprano, el Ejército se disculpó por las muertes de decenas de manifestantes prodemocráticos ocurridas desde el inicio de las actuales protestas, el viernes por la noche, y prometió enjuiciar a los miembros de fuerzas de seguridad que hayan sido responsables, en otro intento por aplacar el descontento.
La plaza Tahrir estuvo este jueves en calma por primer día desde el comienzo de la agitación, que constituye el periodo de violencia de mayor duración desde los 18 días de revuelta que terminaron con la caída de Mubarak, en febrero.
La policía y los manifestantes acordaron este miércoles una tregua negociada por clérigos musulmanes luego de enfrentamientos que dejaron casi 40 muertos y más de 2000 heridos.
La tregua entró en vigor este jueves a las 6 y al caer la noche seguía rigiendo, pese a que miles de personas se mantenían firmes en la plaza Tahrir, informó CNN.
"No nos vamos, se va él", cantaban los manifestantes, en alusión a Tantawi.
El manejo del proceso de transición por parte de la Junta fue muy criticado por grupos de derechos humanos y activistas políticos y prodemocráticos que acusan a los militares de querer perpetuarse en el poder incluso después de que se elija a un nuevo Parlamento y a un presidente que llene el vacío que dejó Mubarak.
Los comicios legislativos comenzarán el lunes y se dividirán en tres fases que se extenderán por igual número de meses.
El martes, bajo la presión popular, Tantawi aceptó adelantar las elecciones presidenciales para antes del 30 de junio próximo, luego de haberlas fijado inicialmente para fines de 2012 ó principios de 2013.
Según el último balance oficial ofrecido ayer por el Ministerio de Salud, al menos 35 personas murieron y más de 2000 resultaron heridas en los cinco días de represión y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden.
Organizaciones de derechos humanos y fuentes de morgue dijeron este miércoles que los muertos fueron al menos 38.
El ministro de Salud, Amr Helmy, reconoció este miércoles por la noche el uso de munición real, cartuchos y balas de goma contra los manifestantes en la plaza Tahrir, tras visitar varios hospitales que están tratando a los heridos en las protestas, según informó este jueves el diario egipcio Al Masry al Youm.
La Fiscalía está investigando el origen de los disparos.
Durante su inspección a los hospitales de campaña que están situados en la plaza, Helmy señaló que decidió formar un comité para examinar el tipo de gas lacrimógeno utilizado por las fuerzas de seguridad y el grado de toxicidad del mismo y prometió hacer públicos los resultados en cuanto estén disponibles.
Asimismo, destacó que vio personalmente las granadas de gases utilizadas y subrayó que son de fabricación estadounidense y estaban fuera de la fecha de vencimiento.
Por último, descartó el uso de agentes nerviosos.
"Los síntomas de mareo y desmayos son síntomas causados por los propios gases lacrimógenos", aseguró Helmy, negando que hayan estado potenciados con sustancias nocivas para el sistema nervioso.