Diario EL COMERCIO - Editorial
Un paso importante en el contexto del VI Gabinete Binacional dieron ayer los presidentes de Ecuador y Colombia, para enfrentar los problemas persistentes en su frontera común, que desde luego no se reducen a la seguridad. Juan Manuel Santos y Lenín Moreno acordaron fortalecer el trabajo conjunto en la frontera de los dos países, en materia de Inteligencia e intercambio de información, para de este modo apoyar el trabajo de las fuerzas armadas frente a la delincuencia organizada. No solo en San Lorenzo -donde hace unos días explotó un cochebomba frente a una guarnición policial-, sino a lo largo de toda la frontera persisten las actividades delictivas a cargo de fuerzas irregulares, con más énfasis desde la desmovilización de las FARC.