PROVINCIA/ La medida será anunciada este viernes en Mar del Plata por el gobernador Daniel Scioli, en el marco de un congreso policial. Estará acompañado por 81 intendentes y 12 mil uniformados.
12.02.2015
La investigación y lucha contra el narcotráfico en la provincia de Buenos Aires será delegada a los municipios una vez que comiencen a funcionar las nuevas Direcciones Departamentales de Investigaciones (DDI) y Delegaciones Departamentales de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas (DDA) en cada uno de los 135 distritos.
La medida será anunciada este viernes por el gobernador Daniel Scioli en la ciudad de Mar del Plata (en el marco de un congreso policial). EL mandatario estará por el ministro de Seguridad, Alejandro Granados, 81 intendentes y 12 mil policías.
La propuesta implicará que “cada municipio tenga su propia unidad para combatir el narcotráfico (DDA) y una Dirección Departamental de Investigaciones, pasando de las actuales 40 a 135”, se informó oficialmente.
Fernando Jantus, subsecretario de Planificación de la cartera de Seguridad, expresó que a los policías que participarán del congreso, que forman parte del Operativo Sol, se los capacitará con una “academia general sobre lucha antinarcóticos, investigaciones y patrullas rurales”. Luego “cada uno de ellos irá al municipio que le corresponde a trabajar”.
Combate. Históricamente la lucha contra el narcotráfico fue jurisdicción del Estado nacional, pero el 31 de agosto de 2005, el entonces gobernador Felipe Solá anunció el envío a la Cámara de Diputados la adhesión de la provincia a la Ley que quitó de la órbita Federal el tráfico de estupefacientes a baja escala, sancionada un mes antes en el Congreso Nacional.
El entonces gobernador fue uno de los impulsores de las desfederalización de la lucha contra el narcotráfico. Uno de sus argumentos era que la provincia de Buenos Aires iba a contar "con un total de 450 fiscales para intervenir en casos de drogas", ya que la justicia provincial podría intervenir en este tipo de delitos.
En abril de 2005, Solá había declarado que persiguiendo el comercio minorista "es como se llega para arriba a generar problemas al comercio mayorista”. Pero entonces, los jueces bonaerenses no estuvieron de acuerdo con esa iniciativa.
Antes de que el Congreso Nacional sancionara la desfederalización, desde Colegio de Magistrados bonaerenses salieron al cruce de la iniciativa, con notoria dureza. "Suponer que resolver problemas complejos es cambiarlos de jurisdicción, es de una simpleza que preocupa", indicaron en una nota que enviaron a legisladores nacionales.
Y luego la entidad disparó con grueso calibre: "Pensar que sin modificar las estructuras actuales del Poder Judicial, sin recursos ni capacitación, a fuerza de voluntarismos y espontaneidad, la estructura de la Justicia de la provincia de Buenos Aires -que el mismo poder político denuncia colapsada-, podrá hacerse cargo de la persecución de un delito que por su entramado, complejidad y extensión, jaquea a los sistemas judiciales y policiales de los países más desarrollados, habla, en el mejor de los casos, de apresuramiento e ignorancia".