mie, 01 jun 2016 21:16 UTC
El movimiento de protesta 'Nuit Debout' en París, levantado por primera vez por los jóvenes, ahora se extiende a huelgas a nivel nacional por parte de sindicatos.
"Hasta que no tengan consciencia de su fuerza, no se rebelarán, y hasta después de haberse rebelado, no serán conscientes."
~ George Orwell, 1984
La agitación se extiende en todas partes del mundo como en una pesadilla orwelliana.
Las huelgas de los trabajadores se están extendiendo en Francia.
Tan sólo en el último par de meses, hemos visto lo que es efectivamente un "golpe de Estado legal" contra el presidente democráticamente electo de Brasil; la presión continua y constante para eliminar a al-Assad del poder en Siria; la guerra económica en Venezuela que amenaza con llevar al 'chavismo' a un final ignominioso; y cómo los llamados 'Papeles de Panamá' forzaron la renuncia del Primer Ministro de Islandia, quien ha sido en su momento el primer ministro más joven del mundo, y quien supervisó la resolución de ese país respecto a la deuda privada de los banqueros, la cual fue única en el mundo.
Si le permitimos hacer lo que quiera, la "Élite Secreta" que gobierna Occidente reemplazará a estos gobiernos anteriormente democráticos por el mismo sistema hambriento de poder que vemos en el resto de Occidente - una oligarquía arraigada que consume todo lo que puede tener en sus manos, incluidos los recursos humanos ..
La gente común en Europa ha estado sintiendo esta incesante búsqueda de poder total en forma de una "austeridad" impuesta desde arriba. Algunas poblaciones básicamente se han rendido, llevando a cabo protestas relativamente moderadas frente al pillaje y el saqueo atroz. Pero los franceses, al igual que los griegos, no lo han tomado de rodillas. Los franceses están resistiendo, en masse, para desafiar a esa bota patológica dirigida directamente contra sus cuellos.
Durante los últimos meses, las protestas masivas - que aumentan en escala cada semana que pasa - contra las 'reformas' del gobierno han atestiguado a decenas e incluso cientos de miles de personas que salieron a las calles en varias ciudades de Francia. Y no sólo de vez en cuando, sino que casi a diario. En ciertos momentos, una multitud de más de 300.000 personas ha estado protestando. Ése es un número bastante grande para la civilización occidental actual, considerando el grado de desmoralización y apatía al que ha llegado.
Por supuesto, puede que no haya oído hablar de esto porque la reacción francesa contra los dictados de austeridad apenas tiene cobertura en los medios occidentales, como es el caso de la mayoría de las protestas masivas que se dan en el mundo occidental en estos días.
"Reforma" laboral
Cuando Nicolás Sarkozy "ganó" la presidencia francesa en 2007, el gobierno francés pasó de estar en contra de la guerra de Irak y de ser mayormente crítico de la política exterior anglo-estadounidense a encomendar tropas francesas a Afganistán, unirse a la OTAN y seguir en mayor medida la línea de la "Guerra contra el Terror". Por primera vez, Francia básicamente tuvo a un títere de Estados Unidos como presidente. Y, como Sarkozy diría más adelante en relación con la protesta popular contra la traición a la soberanía de Francia, "me parece que cuando hay huelgas, nadie se da cuenta".
La crisis económica del 2008 le costó inmediatamente a Francia unos 600.000 puestos de trabajo. Las medidas de austeridad posteriores llevaron la popularidad de Sarkozy a la taza del baño, dejando la puerta abierta a la presidencia de "socialista" y de la "izquierda radical". François Hollande se convirtió en el hombre del momento en el año 2012.
Hollande, el primer presidente "socialista" desde Mitterrand en la década de 1980, fue elegido sobre la base de su plataforma anti-austeridad y anti-imperialista. Sin embargo, como la mayoría de los políticos occidentales, él ha demostrado ser totalmente impotente para detener la ola de miseria económica. Bajo Hollande, el desempleo ha alcanzado el 40 por ciento en algunas zonas de Francia, y el 25,7% para los jóvenes. A pesar de la desesperada situación económica en la que se encuentran muchos franceses, Hollande - siguiendo la orden de su 'asesores' - continúa forzando a los franceses a engullir políticas de austeridad.
Si bien hizo campaña para retirar a las tropas francesas de Afganistán, cuando fue elegido las envió, en su lugar, a Mali y ahora a Libia. Y él continúa el empuje de la UE por la austeridad generalizada para todos.
En virtud de la legislación laboral recientemente propuesta - defendida por la élite empresarial y política como si fuera la "liberación" francesa de los derechos de los trabajadores - la gente "ganaría" el "derecho" de no tener que responder a mensajes de correo electrónico de trabajo mientras está en casa, a cambio de que las empresas tengan derecho para despedir a los empleados por un capricho y hacerlas trabajar más duro que nunca.En esencia, esta "ley laboral" francesa enfrentará metafóricamente a los trabajadores franceses unos contra otros, en una pelea hasta la muerte económica para ver quién es el que puede rebajarse más a sí mismo ante las corporaciones.
Los franceses han dejado claro que no se están tragando las garantías de Hollande de que esto sería bueno para ellos, sin embargo, los oligarcas franceses tienen poco tiempo para la democracia de base, y menos aún para la democracia parlamentaria. Y la semana pasada, con un artículo especial en la constitución que data de la guerra de Argelia, hicieron pasar la ley a la fuerza, al estilo totalitario. Ahora el proyecto está listo para ser considerado en el Senado, a pesar de las continuas oleadas masivas de protesta pública.
Finian Cunningham escribe lo siguiente respecto a la supuesta base sobre la que esta "reforma laboral" ha sido instituida por decreto en Francia:
Esta forma de ver las las condiciones económicas actuales es errónea - por no decir inmoral. Desde la crisis económica mundial en 2008, lo que hay que entender es que el problema del bajo crecimiento en Francia, Europa, e incluso en el Reino Unido y los Estados Unidos (donde están aparentemente mejor), no es realmente un problema de productividad de los trabajadores. Es una cuestión mucho más grande sobre una ruptura fundamental e histórica del sistema capitalista. Esto se refleja en el nivel sin precedentes de la desigualdad entre una pequeña élite y la inmensa mayoría de la sociedad. La pobreza crónica y la austeridad de salarios son la razón por la que el consumo y el crecimiento se han estancado. La injusticia sistemática necesita ser abolida, no apaciguada.
Los sindicatos respondieron al llamado de los estudiantes "No vivan como esclavos - Huelga general".
En un momento dado de la semana pasada, hasta el 80% de las estaciones de servicio en la región de París o bien se quedaron, o casi se quedaron, sin combustible, debido a que los trabajadores en las refinerías costeras se declararon en huelga. Este bloqueo particular se ha aliviado por el momento, pero sólo porque el gobierno francés se vio obligado utilizar sus reservas estratégicas de petróleo.
Mientras tanto, los sindicatos de transporte franceses están llamando a "huelgas indefinidas" que han comenzado a tiempo para la celebración del campeonato de fútbol Euro 2016 UEFA, un gran evento internacional que se espera que traiga 2,5 millones de visitantes a Francia este mes. "ISIS", por supuesto, dijo que tendría como objetivo el torneo de fútbol, y el Departamento de Estado de Estados Unidos ha advertido a los ciudadanos estadounidenses que no viajen a Europa por esa razón.
El vocero idiota del Departamento de Estado, John Kirby, explicó que la razón por la que la advertencia se había publicado era debido a que "no estaba al tanto de ninguna amenaza terrorista específica que fuera creíble". Tiene sentido.
Los trabajadores ferroviarios en Francia están reaccionando particularmente contra el movimiento de despojarlos de sus protecciones legales, reduciendo sus tiempos de descanso; un proceso que parece estar diseñado para allanar el camino hacia una legislación a nivel de la UE que llegaría a privatizar de manera efectiva todos los servicios ferroviarios. La propaganda que acompaña a estos ataques sostiene que Francia se beneficiará de la destrucción de sus derechos laborales ganados con mucho esfuerzo con el fin de "liberar" a los trabajadores mediante lo que el ex Presidente de la Reserva Federal de EE.UU., Alan Greenspan, denominó explícitamente un régimen de "mayor inseguridad laboral". Como Noam Chomsky explicó:
Si los trabajadores están más inseguros, eso es muy "sano" para la sociedad, ya que si los trabajadores se sienten inseguros, no pedirán salarios, no harán huelgas, no pedirán prestaciones; ellos servirán a los maestros con mucho gusto y pasivamente. Y eso es óptimo para la salud económica de las corporaciones.
Pero antes de "aligerar" la "carga" en su sistema de control de la deuda mediante la "liquidación" del capital humano en Francia, primero tienen que romper las espaldas de los trabajadores. Y no ha sido fácil para las autoridades francesas y sus tácticas policiales de mano dura que solamente sirven para inflamar aún más la reacción del público. El resultado de estos intentos implacables para despojar a los trabajadores de sus derechos y embrutecer a comunidades enteras ha hecho que las calles en varias ciudades importantes se conviertan regularmente en zonas de guerra:
https://www.youtube.com/watch?v=BDgxOhxNu5o
Y las leyes anti laborales draconianas no son las únicas cosas por las que los franceses están molestos.
La globalización de Palestina
Desde los múltiples ataques coordinados en París el pasado mes de noviembre, las autoridades francesas han convertido el país en un "Oriente Medio light", con numerosos allanamientos sin orden judicial en hogares musulmanes e incursiones que han incluido importantes actos de violencia policial. Y así como en la Palestina ocupada, Irak y Siria, las madres han perdido a sus hijos, los ancianos han sido tratados brutalmente, y familias enteras han sido aterrorizadas en medio de la noche - todo en nombre de la "guerra contra el terrorismo".
En un solo día (31 de marzo), 266 protestas contra la 'ley de reforma laboral' tuvieron lugar en estas ciudades (¡casi todas las ciudades de Francia!).
Se han realizado miles de estas incursiones llevando a lo que las autoridades dicen que son "pocos resultados". Lo que se oculta convenientemente es el hecho de que los terroristas reales (al menos, las personas que realmente tienen alguna participación en cometer atrocidades en Siria y en otros lugares) son bien conocidos por las autoridades, y sus movimientos son bien conocidos antes de que aparezcan en los ataques terroristas.
Pero estos no son los "resultados" que realmente les importan a ellos. Lo que es importante, para un grupo de personas aparentemente pequeño pero con gran alcance, es que el mundo occidental entienda que los "musulmanes=terroristas" y que ellos, por lo tanto, deben ser acosados y violados dondequiera que se encuentren. Y si no entienden esto, entonces se llevan a cabo ataques terroristas hasta que la gente "se ponga al día con el programa".
Si bien puede parecer que la guerra del terror y la histeria anti musulmana están a un mundo de distancia de la "reforma" de las leyes laborales europeas a favor de los intereses corporativos y bancarios, el aumento de las medidas de seguridad y el miedo que engendran proporcionan un entorno altamente susceptible para sofocar o aplastar a la disidencia en tales cuestiones como que el mundo sea "más seguro" para las corporaciones occidentales.
Por lo tanto, las autoridades francesas extendieron el estado de emergencia del país - ¡el cual prohibía oficialmente todas las protestas que se han dado allí recientemente! - hasta el final del mes de julio para incluir al torneo de fútbol "marcado como un objetivo de ISIS". Sin embargo, muchos ciudadanos franceses parecen ser escépticos ante este tipo de propaganda nefasta, y hartos de la campaña de seguridad falsa y la naturaleza subordinada de sus políticos que claman tener valores "socialistas" elevados, mientras que de forma rutinaria ayudan a reemplazar sus derechos civiles por el totalitarismo corporativo:
"La ley laboral fue la gota final", dijo Matthiew, de 35 años, quien estaba en una nueva formación para ser un maestro después de 10 años en el sector privado, y había establecido un grupo de canto revolucionario improvisado en la plaza. "Pero es mucho más grande que eso. Este gobierno, que se supone que es socialista, ha salido con una serie de cosas con las que no estoy de acuerdo, mientras que no hace frente a los problemas reales como el desempleo, el cambio climático y una sociedad encaminada hacia el desastre".
Jocelyn, de 26 años, una ex estudiante de medicina que actúa como portavoz de prensa del movimiento, dijo: "Hay un paralelismo con [los movimientos] Occupy y el de los Indignados. La idea es que todo el mundo hable. La gente está realmente enferma y cansada y esa sensación se ha ido amontonando durante años. Todo lo que Hollande prometió una vez a la izquierda y luego renunció realmente me deprime. En lo personal, es el estado de emergencia, las nuevas leyes de vigilancia, los cambios en el sistema de justicia y la operación de seguridad".
Todo un nuevo movimiento ha ganado terreno, obteniendo el apoyo de elocuentes defensores de la resistencia tales como Yanis Varoufakis. ¿Acaso su momentum será cooptado para profundizar las grietas dentro de Europa? Esto es ciertamente una posibilidad. Francia ha sido blanco en numerosas ocasiones con el fin de "mantener la línea". Estas manifestaciones pueden ser fácilmente atacadas por "terroristas" y eso sí que sería un regalo del cielo para los oligarcas. Como si estuviera preparando el escenario o intentando infundir una sensación de inseguridad, el jefe de seguridad interna de Francia recordó recientemente al país que "ISIS" está listo para atacar en cualquier lugar en el que "se reúnan grandes multitudes":
"Corremos el riesgo de ser confrontados con una nueva forma de ataque: una campaña terrorista que se caracteriza por dejar artefactos explosivos en lugares en donde se reúnen grandes multitudes, multiplicando este tipo de acción para crear un clima de pánico".
Tal vez la élite francesa está tomando una lección del libro de control de la población turca. En Turquía, cada vez que hay una manifestación contra el gobierno, "ISIS" o los "kurdos" son culpados de bombardeos que matan a los manifestantes. Dado que los parlamentarios franceses recientemente votaron para cancelar las sanciones antirrusas de Washington, agravar o instigar a la violencia en las protestas sin duda sería una manera de enviarles un "recordatorio" de que sus prioridades yacen con el 1%, no con el pueblo.
Conclusión
Vivimos en un mundo gobernado por y para psicópatas, y los seres humanos normales no podemos soportar tanto abuso. Como he escrito con respecto a la destrucción en marcha de los pueblos palestinos por parte de Israel, "Estamos cayendo en picado a un totalitarismo absoluto en este planeta, casi en todas partes en las que usted pueda pensar, y si usted cree que está exento o es excepcional, piénselo de nuevo. Y si es un miembro de la élite, recuerde la Revolución Francesa y como muchas cabezas de la élite rodaron por el andamio de la Madame Guillotine".
El empuje hacia el totalitarismo en la forma de una sumisión completa y brutal a los intereses corporativos es global, y es grave. Como Orwell dijo, "Hasta que no tengan consciencia de su fuerza, no se rebelarán, y hasta después de haberse rebelado, no serán conscientes". Y como Laura Knight-Jadczyk escribió: "el conocimiento junto a la búsqueda colectiva de la verdadera libertad, son los antídotos para esta patocracia global".
Corey es coanfitrión habitual del programa 'Truth Perspective' de SOTT Radio Network. Se ha capacitado como trabajador social y sus pasiones incluyen la investigación, la música, la gestión de crisis, y cocinar deliciosos platillos.
https://es.sott.net/article/46445-Protestas-masivas-en-toda-Francia-La-resistencia-contra-la-pesadilla-orwelliana-mundial