LA ELECCIÓN DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA SE APLAZA OTRA VEZLa votación prevista en la tarde de ayer para elegir al presidente de la República italiana fue aplazada hasta las 18.30 de hoy por el presidente de la Cámara de Diputados, Oscar Luigi Scalfaro, quien, antes de tomar esa decisión, la consultó con los jefes de los grupos parlamentarios.
Los partidos, que tras tener noticia del asesinato del juez Giovanni Falcone, en la tarde del sábado, se apresuraron a proclamar que la elección resultaba inaplazable, siguen divididos sobre una alternativa que ahora parece reducirse al propio Scalfaro, democristiano, y al presidente del Senado y presidente de la República en funciones, Giovanni Spadolini, del Partido Republicano (PRI). La Democracia Cristiana (DC) concluyó sin acuerdo en la tarde de ayer una asamblea que debería haber decidido hacia cuál de estas dos candidaturas institucionales confluirán sus votos. Tanto el ex radical Marco Panella como los verdes sostienen desde hace tiempo la candidatura de Scalfaro, una figura que resulta de excesivo carácter para muchos de sus correligionarios democristianos. Republicanos, lógicamente, y los socialistas parecen inclinarse por Spadolini, aunque ayer no se excluía que los últimos citados presentaran otro candidato.
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La postura del PDS
El Partido Democrático de la Izquierda (PDS) continuará sosteniendo, con el apoyo de Refundación Comunista, la candidatura de Giovanni Conso, ex presidente del Tribunal Constitucional, según se anunció ayer al término de una reunión polémica celebrada por el partido. Su secretario general, Achille Occhetto, sostuvo, en controversia con elementos del sector reformista, que un candidato que esté por encima de las partes en conflicto, como el que se busca en las candidaturas institucionales, sólo puede ser alguien ajeno a los juegos de las secretarías de los partidos, como es el caso de Conso. Occhetto dijo que, en consecuencia, no sumará los votos del PDS a mayorías de compromiso. Si este panorama se mantiene, resulta improbable que la elección presidencial, fallida desde hace ya 12 días, pueda resolverse esta tarde, al término de una jornada que, por otra parte, seguirá centrada en el asesinato de Falcone.
Tanto Spadolini como el ministro de Justicia -Claudio Martelli-, el de Interior -Vincenzo Scotti-, Giulio Andreotti y muchas otras personalidades tenían previsto estar a las once de la mafiana de hoy en Palermo para asistir a los funerales del juez y de su esposa, Francesca Morvillo. El Gobierno acudirá por la mañana al Parlamento para explicar el atentado ante el pleno.
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