Pin It
dea_pngLA DEA, COMO UNA RED GLOBAL DE INTELIGENCIA
Nuevas filtraciones de Wikileaks
Revelan que sus atribuciones van más allá de la lucha contra la droga
Lunes 27 de diciembre de 2010
Ginger Thompson y Scott Shane
The New York Times
WASHINGTON.- La Agencia Antidroga de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) se ha transformado en una organización de inteligencia global con atribuciones que van mucho más allá de los narcóticos, y con una red de escuchas tan extendida que incluso recibe demandas de políticos extranjeros que quieren usarla en contra de sus adversarios, según revelaron los cables diplomáticos secretos.
Los cables, que forman parte del paquete obtenido por WikiLeaks, muestran cómo los agentes antidrogas tienen que hacer equilibrio entre la diplomacia y la aplicación de la ley en lugares donde no es fácil distinguir a los políticos de los traficantes, y donde las organizaciones de la droga son mini-Estados en sí mismos, cuya riqueza y violencia les permiten llevarse por delante a los gobiernos.
Los diplomáticos dejaron un registro de inolvidables viñetas de una parte de la lucha contra las drogas que en muchos casos pasa virtualmente inadvertida.
•    En Panamá, un mensaje urgente desde la BlackBerry del presidente le exigía al embajador norteamericano que la DEA espiase a sus enemigos políticos. "Necesito ayuda para pinchar teléfonos", decía.
•    En Sierra Leona, una importante causa judicial por tráfico de cocaína estuvo a punto de quedar desactivada porque el fiscal general pretendía 2,5 millones de dólares de soborno.
•    Los altos mandos de las atribuladas fuerzas armadas mexicanas elevaron a la DEA pedidos personales de colaboración, confesando su poca fe en las fuerzas policiales de su país.
•    En Guinea, el mayor capo del narcotráfico resultó ser el hijo del presidente, y los diplomáticos descubrieron que antes de una gigantesca quema de cocaína secuestrada por las autoridades, ésta había sido reemplazada por harina.
•    Los cables enviados desde Myanmar, blanco de estrictas sanciones de Estados Unidos, revelan que los informantes de la DEA enviaban reportes tanto del modo en que la junta militar se enriquece con dinero de la droga como de las actividades políticas de los opositores a la junta.
Los cables referidos a la guerra contra la droga terminan de armar un cuadro más claro de la corrupción propiciada por los grandes narcotraficantes, del engañoso juego de descubrir qué funcionarios extranjeros están realmente bajo el control de los barones de la droga, y del modo en que una agencia con iniciativa que opera a las sombras del FBI se ha convertido en mucho más que una oficina contra el narcotráfico.
La DEA tiene ahora 87 oficinas en 63 países y trabaja en estrecha colaboración con gobiernos que quieren mantener a la CIA a cierta distancia. Debido a la ubicuidad del flagelo de la droga, la DEA hoy tiene acceso a los gobiernos extranjeros, incluidos aquellos que, como Nicaragua y Venezuela, mantienen tensas relaciones diplomáticas con los Estados Unidos. Son muchos los que están ansiosos por sacar ventaja de la capacidad tecnológica de la agencia para detectar drogas y pinchar teléfonos.
En algunos países, esa colaboración parece funcionar. Los informes de la DEA han ayudado a derrotar a narcotraficantes, incluso carteles enteros. Pero las victorias pueden tener un precio alto: los cables llevan la cuenta de informantes y agentes asesinados en México y en Afganistán.
Las escuchas
Los servicios de inteligencia de Venezuela le pagaron a la DEA con la misma moneda, infiltrando sus operaciones, saboteando sus equipos y contratando hackers para interceptar los correos electrónicos de la embajada norteamericana en Caracas, según informan los cables.
Y como la agencia contra la droga ha extendido sus operaciones de escuchas para no perder la pista de los carteles, ha recibido fuertes presiones para redirigir su vigilancia antinarcóticos y enfocarla en cuestiones internas de los países, lo que ha generado fricciones con algunos de los aliados de Estados Unidos.
Los cables escritos en febrero por diplomáticos norteamericanos en Paraguay, por ejemplo, describen cómo la DEA enfrentó presiones del gobierno paraguayo para que ayudara a espiar a un grupo de insurgentes conocido como el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Esa organización de izquierda, sospechada de mantener vínculos con las FARC de Colombia, ha perpetrado varios secuestros y está amasando una fortuna en rescates.
Cuando los diplomáticos norteamericanos se negaron a permitirle al gobierno de Paraguay que utilizara el sistema de escuchas de la agencia, el ministro del interior, Rafael Filizzola, amenazó con desconectarlo. "Luchar contra el narcotráfico es importante, pero el narcotráfico no va a hacer tambalear a nuestro gobierno. El EPP, sí", dijo Filizzola.
La DEA enfrentó presiones más intensas el año pasado en Panamá, donde el presidente conservador, Ricardo Martinelli, exigió a la agencia que le permitiera el uso de su programa de escuchas telefónicas -conocido como Matador- para espiar a sus enemigos de izquierda, que según él estaban conspirando para asesinarlo.
Según los cables, a Estados Unidos le preocupaba que Martinelli "no hiciera distinción entre objetivos de seguridad legítimos y enemigos políticos", y se negó, lo que generó tensiones que duraron varios meses. Martinelli, que según los cables tiene "inclinación por la prepotencia y el chantaje", devolvió el golpe con un proyecto de ley que hubiera puesto fin a las actividades de la DEA con fuerzas especialmente entrenadas.
Y cuando Estados Unidos logró frenar también esos intentos -trasladando el sistema Matador a las oficinas del fiscal general, políticamente independiente-, Martinelli amenazó con expulsar a la agencia de Panamá, al asegurar que otros países, como Israel, estarían muy contentos de cumplir con sus pedidos.
Según los cables, los diplomáticos norteamericanos empezaron a dudar de las motivaciones de Martinelli. ¿Realmente quería que la DEA desbaratara un complot o estaba tratando de impedir que la agencia se enterara de la corrupción reinante entre sus familiares y allegados?
Un cable aseguraba que el primo de Martinelli hacía pasar mensualmente decenas de millones de dólares provenientes de la droga a través del mayor aeropuerto de Panamá.
En Paraguay, mientras tanto, los cables indican que Estados Unidos accedió a que las autoridades locales utilizaran las pinchaduras telefónicas en investigaciones antisecuestro, siempre y cuando fueran autorizadas por la Corte Suprema.
Desde 1973, año de su creación, la DEA no ha dejado de ampliar su campo de acción internacional, una expansión debida en gran parte a la naturaleza multinacional del tráfico de drogas, pero también a fuerzas que desde el interior de la agencia aspiran a que tenga mayores atribuciones. Desde el 11 de Septiembre, los altos funcionarios de la agencia han recalcado la existencia de un vínculo cada vez más extendido entre el narcotráfico y el terrorismo para justificar su mayor presencia en el exterior.
En Afganistán, por ejemplo, "los oficiales de la DEA están convencidos de que los niveles más altos del tráfico de drogas y los talibanes no difieren en nada", según señaló en 2007 la entonces titular de la agencia, Karen Tandy. Dijo que estaba infiltrando a sus espías en unidades militares de todo el territorio afgano. Tan sólo en 2007, la DEA abrió nuevas oficinas en Tadjikistán, Kirguizistán y Dubai, así como en tres ciudades de México.
Los cables describen las largas negociaciones por la extradición a Estados Unidos de los dos traficantes de armas buscados por la DEA en el marco de sus actividades más allá de la lucha contra el narcotráfico: Monser al-Kassar, ciudadano sirio arrestado en España, y Viktor Bout, un ruso detenido en Tailandia.
La expansión de la DEA parece impulsada mayormente por fuerzas externas y no internas, pues los traficantes abren nuevas rutas para adecuarse a los nuevos mercados. Así como los carteles mexicanos se apoderan de los cargamentos de droga sudamericana destinada a Estados Unidos, los carteles colombianos han comenzado a mover cocaína desde Africa Occidental hacia Europa.
Traducción de Jaime Arrambide
UNA AGENCIA CON MAS PODER
La DEA fue creada en 1973 bajo la órbita del Departamento de Justicia. Desde 2007, Michele Leonhart dirige a sus 5500 agentes. Los cables obtenidos por WikiLeaks revelan detalles desconocidos sobre su papel.
VENEZUELA
Ataques a la DEA
Las agencias de inteligencia locales lograron infiltrar algunas operaciones de la DEA, sabotearon sus equipos y contrataron por lo menos a un hacker para interceptar los mails de la embajada norteamericana en Caracas.
PARAGUAY
Espionaje a insurgentes
El gobierno de Fernando Lugo pidió a la DEA en Paraguay que espiara al Ejército del Pueblo Paraguayo, un grupo insurgente que ha realizado varios secuestros y al que se lo vincula con las FARC.
MEXICO
Militares desconfiados
Dudando de las capacidades de la policía, sospechada de mantener vínculos con el crimen organizado, altos jefes militares mexicanos pidieron colaboración a la DEA, que desde 2007 a 2009 perdió 10 agentes en el país.
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1336687

REDACTORES

anna.jpgbgeorges.jpgbgiorgio.jpgbjuan.jpgblorenzo1.jpg
Copyright (c) 2009. Antimafia Dos Mil Argentina