DENUNCIAN QUE LA CE GASTA MILLONES EN JETS PRIVADOS, HOTELES, REGALOS Y FIESTAS
POLÉMICA | Investigación periodística Amanda Figueras | Madrid 03/06/2011
Hoteles de lujo de cinco estrellas, viajes en aviones privados, fiestas y regalos de la joyería Tiffanys. Según una investigación periodística, la Comisión Europea ha gastado entre 2006 y 2010 millones de euros en cosas de este tipo. La polémica está servida. La liebre la ha soltado el 'Bureau of Investigative Journalism', una organización sin ánimo de lucro fundada en el euroescéptico Reino Unido y que tiene como objetivo "fomentar la independencia de las investigaciones serias y fomentar una nueva generación de periodistas", según dicen en su página de internet.
Esgrimen como motivación para poner en marcha las pesquisas el hecho de que la Comisión Europea pidiera aumentar el presupuesto un 4,9% mientras los Estados miembros no tienen más remedio que apretarse el cinturón y afrontar privatizaciones y rescates por la elevada deuda pública.
"Nuestra investigación muestra cómo los comisarios europeos viajan en jet privados y obsequian con regalos de la joyería Tiffany a invitados cuando en toda Europa se producen recortes presupuestarios y rescates del Fondo Monetario Internacional", afirman.
Bruselas no da crédito
Por su parte, desde Bruselas y aunque este viernes es festivo, han marcado una línea oficial de respuesta: "La Comisión Europea no está dispuesta a dar credibilidad a las afirmaciones totalmente engañosas hechas por la Oficina de Investigación Periodística".
Según dicen, el organismo "ha omitido las innumerables explicaciones que la Comisión le ha proporcionado para explicar los gastos legítimos en los que ha incurrido. No hay nada nuevo aquí y toda la información lleva ya tiempo a disposición del público en la página web de la propia Comisión. La Comisión se toma muy en serio el uso de dinero de los contribuyentes y está sujeta a amplios controles financieros y al estricto control parlamentario", explican.
Entre los datos más jugosos, destaca que el presidente de la institución, Jose Manuel Durão Barroso, junto con ocho asistentes, gastaron 28.000 euros en cuatro noches de alojamiento en el hotel New York Peninsula, durante su asistencia a la Asamblea General de Naciones Unidas. La información la corroboró el propio vicepresidente comunitario y comisario de Relaciones Interinstitucionales y Administración, Maroš Šefčovič, en su respuesta a una pregunta, en la que justifica la dificultad de encontrar alojamientos cuando hay eventos de tal calibre.
Y no es el único importante gasto que destaca el centro de investigación que, por cierto, también destapó escándalos en la financiación del partido conservador británico. Afirman que en 2009, miembros de la Comisión Europea y sus familias se hospedaron en hoteles de lujo en Papúa Nueva Guinea y Ghana. Destacan que en una ocasión, una delegación formada por 44 personas viajó a Vietnam para trabajar en cooperación interna y se alojaron en el lujoso hotel Palm Garden Resort.
En cuanto a los viajes, según los datos que aporta la investigación del proveedor 'Abelag', facilitados por la Comisión, se gastaron 7,5 millones de euros entre 2006 y 2010.
Pero no todo se quedaba en la casa, también ha habido para los demás. Al parecer, oradores invitados a la Comisión Europea han recibido regalos como joyas de Tiffanys, gemelos y plumas. El gasto total en regalos ha sido de más de 20.000 euros entre 2008 y 2010. Así se desprende de las respuestas a varias preguntas a la CE presentadas por el eurodiputado austriaco independiente Martin Ehrenhauser.
Se gastaron más de 300.000 euros en eventos que se describen como fiestas de cóctel en 2009. "Una noche repleta de maravillas... arte, tecnología, todo combinado con cócteles exóticos y sorprendentes performances y DJs famosos". Así se define, según ha comprobado el 'Bureau of Investigative Journalism', una fiesta que costó 75.000 euros.
El eurodiputado Ehrehauser ha afirmado que es "extremadamente decepcionante ver la facilidad con la que la Comisión Europea gasta el dinero de los contribuyentes europeos, lo que hace la brecha entre los ciudadanos y eurodiputados aún más grande y profunda".
Por su parte, Iain Overton, editor del centro de investigación, comenta en una nota de prensa que su investigación plantea varias preguntas "no tan solo en cómo se despilfarra el dinero de los contribuyentes europeos sino también en la responsabilidad de la Comisión Europea en sus gastos".
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/06/03/union_europea/1307090292.html