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POLVO, PERO NO DE ESTRELLAS
Enseneda - Berisso
Hace 30 años que los vecinos bailan bajo una lluvia de polvo. La empresa COPETRO, procesa el carbón residual de petróleo de refinadoras como YPF y Shell y cubre de negro estas localidades ribereñas. Clausuras y más de 150 demandas ganadas por los vecinos. Pero aún funciona contra los pulmones.La planta de COPETRO S.C. esta ubicada sobre la ribera del Puerto de La Plata, en el margen de Ensenada.
Ocupa una superficie de más de 100 mil metros cuadrados, en los que procesa carbón de petróleo. Trabaja hace más de 30 años y no opera con pequeñeces. Todo el carbón residual de las refinerías de YPF S.A. en La Plata y Luján de Cuyo, Mendoza, y la de Shell en Dock Sud, van a parar a esta gigante. De sus chimeneas emana un enemigo con nombre técnico: cocke, que es el producto que queda del carbón calcinado. Ese el polvo negro que flota como una decoración de mal gusto sobre el cielo de Ensenada y Berisso.
carbonA los vecinos no les duele la estética gris, sino los pulmones. Marcelo Martínez, de la ONG Nuevo Ambiente, que junto con otras Organizaciones No Gubernamentales Ambientales y Vecinales de Ensenada y Berisso denuncian a la empresa, relató a 24CON la situación.
La empresa “fue echada de varios países, y se instalo en Argentina en la década del 70´, cuando el Barrio Campamento de los constructores del puerto ya existía. Siempre hubo problemas”, relata. “Tiene dos antorchas donde se incinera el carbón por donde largan el polvillo que llega a 4 kilómetros a la redonda. La mayoría de los vecinos tiene el polvillo en el fondo de sus casas”, cuenta Marcelo.
Pero no ver el sol no es el mayor problema. “El carbón de cocke es altamente cancerígeno. Mucha gente murió y otra está con problemas respiratorios por los denominados aromáticos policíclicos que contienen las partículas, que son altamente peligrosos y contaminantes como ya lo demostraron los vecinos del Bº Campamento mediante estudios realizados y que constan en la Justicia”, explica Marcelo.
Así los habitantes del río no se pusieron el barbijo del miedo y fueron a la Justicia, que les dio la razón: “Los vecinos hicieron demandas personales respecto a la salud, la calidad de vida y la contaminación”. Las primeras, que se tomaron como casos ejemplificatorios, están ganadas y “hay más de 150”, que irán en el mismo sentido, cuenta el representante de Nuevo Ambiente a este medio.
A pesar de las denuncias realizadas ante las autoridades ambientales de la Provincia, COPETRO “está funcionando en forma ilegal, ya que no posee los certificados de aptitud ambiental como lo exige la ley provincial de radicación industrial, para su funcionamiento”, explican desde las organizaciones.
¿A quién corresponde?
Debido a la categorización de la empresa la fiscalización corresponde al OPDS, donde los vecinos hicieron la denuncia hace meses atrás y le respondieron que la empresa va a realizar infraestructura para menguar el impacto de las partículas volátiles.
Sin embargo esto no traba el derecho de los vecinos a exigir que su municipio realice acciones en defensa y no se quede atado de manos. “Pueden pedir una auditoria, pero en vez de defender los intereses de los vecinos, tienen sus propios intereses económicos”, opina el representante de la ONG, y agrega: “Con la intendencia tenemos un dialogo muy corto, cada vez que presentamos una nota no tenemos respuesta. Por eso estamos haciendo una campaña discusión casa por casa.

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