ESTUDIANTES CHILENOS CONFIRMAN EL PARO Y PIDEN LA RENUNCIA DEL MINISTRO DEL INTERIOR
VIERNES 5 DE AGOSTO DE 2011-08-06
Estudiantes chilenos ratificaron el paro del próximo martes, pidieron la renuncia del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, por la represión de ayer y propusieron un plebiscito para lograr una educación gratuita, mientras se profundiza el asilamiento del gobierno, que llama al diálogo pero rechaza el mantenimiento de la protesta.
"La represión fue desproporcionada, el ministro del Interior tiene que asumir las consecuencias de eso; si quería establecer el orden público y la seguridad ciudadana, se hizo todo lo contrario", afirmó Camila Vallejo, dirigente de la Federación de Estudiantes de Chile (Fech), citada por la agencia noticiosa ANSA.

"Creo que el gobierno tiene que ceder de verdad porque no lo está haciendo, está engañando a la gente, no hay voluntad por hacer cambios profundos en la educación", sentenció.
Añadió que el accionar de la policía fue "rechazado absolutamente", no solo por los estudiantes sino también por la ciudadanía que se sumó masivamente con un "cacerolazo".
La represión policial provocó el rechazo de la ciudadanía, que se solidarizó con "cacerolazos", primero desde los hogares y luego en las calles de varias ciudades del país, acogiendo el llamado que había formulado Vallejo desde la tarde de ayer.
A las cacerolas se unieron automovilistas que hicieron sonar sus bocinas -especialmente en las comunas de Santiago y el sector oriente- en expresión de apoyo a los estudiantes que demandan desde hace dos meses educación gratuita, estatal y de calidad.
Las manifestaciones de ayer culminaron con 874 detenidos en todo el país y 90 carabineros heridos.
Por su parte, el presidente Sebastián Piñera, en el momento más bajo del apoyo a su gestión, con sólo un 26 por ciento de aprobación, reiteró hoy que el gobierno tiene voluntad para dialogar y destrabar el conflicto educacional.
"Es tiempo de construir y buscar acuerdos. Los invito a dialogar y aportar para una educación de calidad", escribió en su cuenta de Twitter.
En cambio, el ministro de Educación, Felipe Bulnes, advirtió, citado por el diario local El Mercurio, que el gobierno "no se moverá "por presiones o ultimátum" al rechazar el plazo de seis días que impuso la Confederación de Estudiantes para que el Ejecutivo entregue una "respuesta clara" a sus demandas.
El ministro de Gobierno, Andrés Chadwick, en una improvisada conferencia de prensa, responsabilizó a los jóvenes por los incidentes.
"Lo que hemos visto son grupos dispersos que quisieron justificar el accionar violento. (Lo sucedido) no es culpa de los carabineros, sino de quienes no quisieron apegarse a las decisiones del gobierno", afirmó.
Por su parte, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Giorgio Jackson, propuso "un plebiscito" para buscar una salida.
"Si no hay una respuesta inmediata del sistema político, que se ponga de acuerdo y que de suma urgencia presente una propuesta con plazos que estén a la altura de las demandas ciudadanas, no veo otra salida que un plebiscito, sobre todo por el tema de una paz social", afirmó Jackson.
El senador socialista Juan Pablo Letelier manifestó a Radio Cooperativa que "la decisión del gobierno de reprimir duramente generó una jornada de protesta nacional que no se veía desde la dictadura".
"La Moneda acentúa así su aislamiento y el rechazo ciudadano hacia las políticas oficiales", afirmó el representante de uno de los partidos de la Concertación, alianza que tampoco capitaliza la crisis del gobierno conservador, ya que su popularidad sólo trepa al 17 por ciento, según las últimas encuestas.
En tanto, el ex presidente socialista Ricardo Lagos reconoció que "los tiempos han cambiado. El andamiaje político que emergió a principios de los 90 está obsoleto" La opinión de Lagos, con matices, es compartida por el ministro de Economía, Pablo Longueira, líder de la Unión Demócrata Independiente (UDI), el partido de derecha más cercano al legado económico de Pinochet.
"Los mensajes de la ciudadanía han sido claros", admitió, citado por la agencia noticiosa alemana DPA.
La crisis social y política de Chile, como coinciden líderes de derecha e izquierda, está abriendo la opción de que las alianzas que gobernaron el país desde el retorno a la democracia en 1990 cedan paso a actores desconocidos.
"Queremos constituirnos como un sujeto político", reiteró en las últimas semanas la líder universitaria Camila Vallejo, vinculada a la juventud del Partido Comunista, en la antesala de los comicios municipales de 2012 y presidenciales de 2013.
En ese marco, la ex presidenta socialista Michelle Bachelet, antecesora de Piñera, lidera aún las preferencias de voto para 2013, según las encuestas, pese a que bajo su mandato se inició la eclosión de la protesta estudiantil contra una educación de claro sesgo neoliberal y mercantil.
A la aprobación de Bachelet le sigue la de Laurence Golborne, ministro de Obras Públicas que se hizo popular con el rescate de los 33 mineros que hoy hace un año quedaron atrapados en Antofagasta.
En ese marco, la mencionada agencia alemana cuestiona en una nota de análisis "¿cuánto más crecerán las protestas contra Piñera? ¿Saldrá del poder como Fernando de la Rúa en Argentina? ¿O su mandato cerrará un ciclo como los de Carlos Andrés Pérez en Venezuela y Gonzalo Sánchez de Losada en Bolivia?".