ADVIERTEN SOBRE EL RIESGO DE UNA GUERRA CIVIL EN SIRIA
Viernes 18 de noviembre de 2011 | Publicado en edición impresa
Las revueltas en el mundo árabe
La UE reclama más presión sobre Al-Assad; Rusia se opone a las sanciones
BEIRUT.- La irrupción de un grupo militar rebelde y el recrudecimiento de la represión por parte del régimen de Bashar al-Assad contra la oposición abonan el camino para el estallido de una guerra civil en Siria, estimaron analistas y diplomáticos.

El denominado Ejército Libre, compuesto por desertores de las fuerzas armadas, volvió a atacar ayer posiciones de las tropas leales a Al-Assad, un día después de haber lanzado su asalto más audaz al disparar contra un complejo de seguridad del régimen en Damasco.
Los enfrentamientos de ayer en varias ciudades del país dejaron un saldo de al menos 14 personas muertas, entre ellas dos niños. Según el opositor Comité de Coordinación, las fuerzas leales a Al-Assad mataron a cuatro militares desertores.
La voz de alarma sobre la situación de las revueltas en Siria, que se prolongan ya por octavo mes consecutivo, la dio Rusia, un país que se opone a la aprobación de una resolución en las Naciones Unidas que condene enérgicamente al régimen de Al-Assad. "Todo esto luce como una guerra civil", dijo el canciller ruso, Sergei Lavrov, en Moscú. Para Rusia, tanto el gobierno sirio como la oposición deben sentarse a dialogar para superar el conflicto.
Moscú vio con buenos ojos la propuesta de la Liga Arabe de enviar una misión de observadores a Damasco si el régimen cesa la represión contra los grupos opositores. La iniciativa, aprobada tras la expulsión de Siria del organismo árabe, pareció encontrar ayer una respuesta positiva en Damasco. Según fuentes de la Liga Arabe, Al-Assad habría aceptado recibir a la misión de observadores con algunas condiciones.
Por su parte, la Unión Europea, con Alemania, Francia y Gran Bretaña a la cabeza, insistió ayer en que la ONU apruebe una declaración de condena contra Al-Assad.
Según varios analistas, la presión de la Liga Arabe será fundamental para una solución negociada al conflicto. "Cuanto más se empantane la comunidad internacional y más demore la Liga Arabe en obligar a Siria a hacer algo, más posibilidades hay de que estalle una guerra civil", estimó Salman Shaij, director del Centro Brookings en Doha. "Hay un verdadero riesgo de guerra civil", coincidió Marwa Daoudy, de la Universidad de Oxford.
Para Burhan Ghaliun, presidente del Consejo Nacional Sirio -el frente político de la oposición-, "uno de los caminos podría llevarnos hacia la libertad y otro hacia la guerra civil que el régimen trata de provocar para que fracase nuestra revolución".
La hipótesis de la guerra civil fue descartada por Estados Unidos. "Es una impresión errónea", dijo en Washington Mark Toner, vocero del Departamento de Estado. Para la Casa Blanca, el régimen de Al-Assad lleva a cabo una campaña de violencia, intimidación y represión contra manifestantes. "No consideramos eso una guerra civil", subrayó Toner.