JUSTICIA ISRAELÍ CONFIRMA CONDENA DE SIETE AÑOS A EXPRESIDENTE KATSAV POR DELITOS SEXUALESViernes 11 de noviembre de 2011 Telesurtv
El Supremo israelí desestimó el recurso presentando por Katsav, que cumplirá en prisión la condena de siete años. (Foto: Efe)
El Tribunal Supremo de Israel confirmó este jueves la condena por violación y acoso sexual contra el expresidente Moshe Katsav y destacó que no hay motivos suficientes para reducir la pena de siete años de cárcel a que fue sentenciado a principios de este año. El próximo siete de diciembre Katsav comenzará a cumplir la condena de cárcel que le fue impuesta en marzo pasado.
Jueces de la máxima instancia judicial de Tel Aviv leyeron la sentencia sobre el recurso del exmandatario contra la pena de prisión por violación y otras ofensas sexuales cometidas contra tres subalternas, cuando se desempeñó como ministro de Turismo y presidente del Estado.
La fiscal Naomi Granot, interpretó la condena como un mensaje importante de que “los delincuentes sexuales recibirán largas condenas y los tribunales defienden los cuerpos, mentes y honor de las víctimas”.
Katsav fue condenado por violar en dos ocasiones a una colaboradora en su época de ministro a finales de los años noventa y por acosar sexualmente a otras dos mujeres que trabajaban con él durante su mandato presidencial entre 2000 y 2007.
Al respecto, el panel de justicia dijo que no había duda que Katsav había mantenido relaciones sexuales por la fuerza y tampoco aceptó la línea de defensa en la que había un romance entre ambas personas.
Moshe Katsav ha negado en todo momento los cargos por los que se le acusa, pero el tribunal de primera instancia de Tel Aviv determinó en su momento que su testimonio había estado "plagado de mentiras".
El juez George Kara, presidente del Tribunal que lo juzgaba desde agosto de 2009 argumentó que Katsav “fabricó pruebas en todo momento” para eludir las acusaciones, añadió que las pruebas hablan por sí mismas y demuestran que se “aprovechó de su autoridad y de la fuerza física para violar a las mujeres”.
Luego de que se leyera el documento el abogado del exmandatario, Zion Amir, solicitó un aplazamiento de varias semanas, pero la corte respondió que Katsav debe reportarse a la corte del Distrito de Tel Aviv el siete de diciembre de este año para comenzar con su sentencia.
Moshe Katsav dimitió el 29 de junio de 2007 tras fuertes presiones políticas con denuncias de al menos otras nueve mujeres por distintos delitos sexuales y el fracasado intento del Parlamento, por primera vez en la historia política israelí, de apartar del cargo a un jefe del Estado.
La fiscal Naomi Granot, interpretó la condena como un mensaje importante de que “los delincuentes sexuales recibirán largas condenas y los tribunales defienden los cuerpos, mentes y honor de las víctimas”.
Katsav fue condenado por violar en dos ocasiones a una colaboradora en su época de ministro a finales de los años noventa y por acosar sexualmente a otras dos mujeres que trabajaban con él durante su mandato presidencial entre 2000 y 2007.
Al respecto, el panel de justicia dijo que no había duda que Katsav había mantenido relaciones sexuales por la fuerza y tampoco aceptó la línea de defensa en la que había un romance entre ambas personas.
Moshe Katsav ha negado en todo momento los cargos por los que se le acusa, pero el tribunal de primera instancia de Tel Aviv determinó en su momento que su testimonio había estado "plagado de mentiras".
El juez George Kara, presidente del Tribunal que lo juzgaba desde agosto de 2009 argumentó que Katsav “fabricó pruebas en todo momento” para eludir las acusaciones, añadió que las pruebas hablan por sí mismas y demuestran que se “aprovechó de su autoridad y de la fuerza física para violar a las mujeres”.
Luego de que se leyera el documento el abogado del exmandatario, Zion Amir, solicitó un aplazamiento de varias semanas, pero la corte respondió que Katsav debe reportarse a la corte del Distrito de Tel Aviv el siete de diciembre de este año para comenzar con su sentencia.
Moshe Katsav dimitió el 29 de junio de 2007 tras fuertes presiones políticas con denuncias de al menos otras nueve mujeres por distintos delitos sexuales y el fracasado intento del Parlamento, por primera vez en la historia política israelí, de apartar del cargo a un jefe del Estado.