Sábado 7 de enero de 2012 Telesurtv
Reino Unido envía destructor al estrecho de Ormuz. (Foto: Efe-Archivo)
Reino Unido envió este sábado un destructor al estrecho de Ormuz para realizar su primera misión, prevista desde hace más de un año, sin embargo, la medida se lleva en medio de una escalada de tensiones entre las potencias occidentales e Irán, que amenazó con cerrar el paso a la navegación.
El corresponsal de teleSUR en Medio Oriente, Hisham Wannous, explicó este sábado que la advertencia de Irán responde a las amenazas sobre nuevas sanciones de occidente en el “sector energético y petrolero iraní”.
“Algunos países de la Unión Europea pidieron aplazar estas sanciones”, recordó el periodista quien indicó que Reino Unido, Francia y Canadá pidieron que la acción se prorrogara por tres meses. Sin embargo, “Grecia que importa la mayor cantidad de sus necesidades petroleras pidió imponer este embargo después de un año, para poder defender su economía que depende de este petróleo”.
Wannous señaló que por su parte, Irán anunció que realizará “nuevas maniobras militares en el estrecho de Ormuz de la Guardia Revolucionaria iraní para demostrar su fuerza y demostrar que es capaz de defender este estrecho”.
Además, Teherán se dirigió a las potencias occidentales “y pidió a los barcos de guerra y portaaviones norteamericanos no acercarse (a la zona), igual para Reino Unido”, agregó el comunicador.
El ministro británico de Defensa, Philip Hammond, advirtió al país persa que cualquier intento de bloquear el estrecho será considerado “ilegal y no tendrá éxito”.
El nuevo HMS Daring, que se encuentra equipado con misiles antiaéreos Sea Viper y capacidad para transportar helicópteros tipo Chinook, completó en 2011 cuatro años de pruebas.
Un portavoz del Ministerio de Defensa británico indicó que la Marina “tiene una presencia continua" en el Golfo desde "hace muchos años" y dijo que se trata de un "despliegue de rutina" y "previsto desde hace mucho tiempo".
Por el mencionado estrecho de Ormuz navega una sexta parte del petróleo del mundo.
Las relaciones bilaterales entre Irán y occidente se han debilitado los últimos años por la insistencia de países imperiales de que Teherán detenga su programa nuclear con fines pacíficos.
El pasado noviembre el Gobierno británico decidió suspender las relaciones financieras entre los dos países, incluso todo contacto con el Banco Central iraní.
Teherán respondió con la aprobación, por mayoría parlamentaria, de una ley para rebajar las relaciones a nivel de encargado de negocios, lo que ha supuesto la retirada de los embajadores.