ALEMANIA | BERLÍN SE POSICIONA
'El genio de la libertad ha salido de la lámpara'
"Alemania apoya con toda su fuerza las manifestaciones pacíficas"
"El pueblo egipcio decidirá quién es será su gobernante"
"Lo importante para nosotros es que estemos del lado democrático"
Rosalía Sánchez | Berlín
01/02/2011
"Es difícil que, después de todo esto, el mundo árabe vuelva a ser lo que era", ha vaticinado el ministro de exteriores alemán, Guido Westerwelle, para quien la sucesión de acontecimientos en Túnez, después en Egipto y también en Jordania son la prueba evidente de que el espíritu de la libertad está abriéndose camino en una parte del mundo que hasta ahora se veía, a causa de esa confrontación de valores, en una posición opuesta a occidente.
"El genio de la libertad ha salido de la lámpara y ahora ya nadie lo podrá parar", decía el número dos del gobierno alemán ante un grupo de corresponsales extranjeros en Berlín que le reprochaban el hecho de que hasta hace apenas unos días el gobierno alemán hubiera respaldado a Hosni Mubarak.
"Bueno, no solamente Alemania, sino todo Occidente está en estos momentos en un proceso de reflexión sobre las líneas diplomáticas seguidas hasta ahora, pero lo que está sucediendo en las calles supone un punto de inflexión muy significativo en la realidad de esos países y es lógico que modifique nuestra posición", justificaba.
"Alemania, en consecuencia, no apoya en ninguna manera a partidos o a personas concretas, pero sí apoya con toda su fuerza la celebración de manifestaciones pacíficas y de elecciones libres acordes con estos acontecimientos, que determinarán el futuro a medio plazo de esta inestable región".
El jefe de la diplomacia alemana explicó que estos movimientos sociales de protesta que lograron derrocar al dictador tunecino Ben Ali y están poniendo en serios aprietos al presidente egipcio, Hosni Mubarak, están ligados tanto a problemas internos de los países afectados como a cuestiones internacionales, como la globalización.
Causas de la revuelta y posición de Europa
Westerwelle apunta como causas internas de las revueltas el hartazgo de las clases medias del mundo árabe, que "con una buena educación" y cierto hastío por la corrupción nacional, exigen "una mayor proporción de bienestar".
También subrayó el papel fundamental que la comunicación y las nuevas tecnologías están jugando en estas revoluciones, ya que hay una nueva generación árabe que participa mucho más intensamente, lo cual no sólo afecta a los aspectos económicos de estos países, sino que también sirve de correa de transmisión de "valores, ideas y perspectivas sobre la libertad a través de instrumentos que los jóvenes manejan a diario, como los sms o internet".
Aunque se negó a reconocer que los líderes europeos hayan ninguneado a la representante en Asuntos Exteriores de la UE, Catherine Ashton, Westerwelle sí admitió que el comunicado conjunto emitido el pasado sábado por Angela Merkel, David Cameron y Nicolas Sarkozy, fue pensado para volcar en él todo el peso de la voz de Europa.
Por último, Westerwelle advirtió a los gobiernos no democráticos de la región que si se intentan reprimir esta ola libertaria con violencia, podrían estar favoreciendo la llegada de extremistas.
"El pueblo egipcio decidirá quién será su gobernante. Lo importante para nosotros es que estemos del lado del proceso democrático y que hayamos acordado ayer en Europa apoyar esa democratización. Sin embargo, no queremos olvidar que al mismo tiempo estamos interesados en que ese país mantenga su estabilidad, es decir, que surja un desarrollo y un movimiento democrático y no que terminen asumiendo el poder los fundamentalistas o radicales. Si fuera así, las condiciones, también desde el punto de vista de los Derechos Humanos, terminarían siendo mucho peores", advirtió.
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/02/01/internacional/1296590912.html