REBELIÓN DE TOGAS Y TIZAS CONTRA SARKOZY EN FRANCIA
Los jueces cerraron los tribunales y repudian en las calles las críticas del presidente hacia la Justicia. Los maestros llamaron a una huelga nacional contra 16 mil despidos
Explota la bomba que Nicolas Sarkozy detonó hace una semana. El mandatario responsabilizó a los magistrados por el asesinato de Laetitia Perrais, una joven de 18 años cuyo cuerpo apareció descuartizado en un lago de Bretaña. El principal sospechoso del crimen es un multi reincidente que había quedado en libertad sin seguimiento clínico
"Cuando se deja salir de prisión a un individuo como el presunto culpable sin asegurarse de que tendrá un seguimiento, es un error. Los que dejaron que esto ocurriera serán sancionados", se envalentonó Sarkozy. La respuesta de los jueces no se hizo esperar. Cientos de ellos protagonizan una "movilización sin precedentes" con epicentro en Nantes, jurisdicción que fue blanco de las críticas del presidente.
La Unión Sindical de Magistrados informó que 170 de los 195 tribunales y cortes de apelación de Francia votaron cerrar sus puertas y postergar todas las audiencias no urgentes. Abogados, policías y trabajadores penitenciaros se suman a las protestas. El gobierno amenazó con que los magistrados tendrán que "rendir cuentas" por el abandono de sus puestos de trabajo, pero no fue suficiente para frenar la movilización.
Los jueces se quejan de que no cuentan con los medios para instruir los casos con eficiencia. "Hace años, desde antes de Sarkozy, venimos diciendo que la Justicia no dispone de los fondos necesarios para funcionar normalmente", recordó Marc Trevidic, prestigioso juez antiterrorista y presidente de la Asociación de Magistrados Instructores. "Pero ahora, además, nos echan la culpa a nosotros".
El testimonio de los magistrados de aplicación de penas del Tribunal de Gran Instancia de Bobigny fue categórico: "Tenemos en nuestras manos más de 10.600 expedientes y somos siete". Las carencias de los jueces y las declaraciones incendiarias de Sarkozy avivan una disputa que comenzó cuando el galo asumió el Ministerio del Interior, durante la segunda presidencia de Jacques Chirac.
También los maestros
En tanto, el gremio docente sostiene hoy una huelga nacional contra la suspensión de 16 mil puestos de trabajo para el próximo año académico. El gobierno tomó esa medida pese a que la cantidad de alumnos tiende a aumentar. Más de 70 departamentos de los 100 que hay en Francia acompañan el paro.
Según un sondeo recogido por la estatal Radio Francia Internacional, el 80% de los franceses considera "errada" la política educativa de Sarkozy.
10/2/11

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