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PRESENTACIÓN DEL LIBRO “SAQUEO Y ABUSO. LA LEY APP DE CARTES”
Por Jorge Figueredo – 7 de Marzo de 2014
El pasado martes 4 de marzo de 2014 se realizó en el “Centro Cultural el Cabildo “de Asunción el lanzamiento del libro “Saqueo y Abuso. La Ley APP de Cartes” de los Ingenieros Ricardo Canese y Mercedes Canese. El evento congregó a una buena cantidad de personas de diversas organizaciones sociales; sindicales, estudiantiles, campesinos, partidos de izquierda, y como parte de la lucha antimafia en Paraguay estuvimos con el hermano y compañero de lucha Omar Cristaldo escuchando las propuestas formuladas por los presentadores y autores del libro al referirse a la ley 5.102/ 2013, popularmente denominada como de “Alianza Público-Privada” o Participación Público-Privada. Estuvieron como presentadores el Sociólogo José Carlos Rodríguez, José Pineda, Secretario Gral. de SITRANDE (Sindicato de Trabajadores de la Administración Nacional de Electricidad), Marcial Gomez, Secretario Gral. Adjunto de la FNC (Federación Nacional Campesina) y Aníbal Carrillo, Secretario General del FG (Frente Guazu): que aglutina a varias organizaciones políticas de izquierda.
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Ing. Mercedes Canece                        Ing. Ricardo Canese
saqueoSe dio inicio al acto con las palabras del conocido sociólogo paraguayo José Carlos Rodríguez, autor de varios libros, quién afirmó: “La alianza Público-Privada es la materialización en que los empresarios van a tomar o tener una gestión directa del Estado. Es achicar y someter el bien común al interés del empresariado. Esta ley de Alianza Público-Privada es la materialización de un Neoliberalismo duro, de descontrol total del empresariado paraguayo. Constituye una oligarquía muy particular que no respeta el medio ambiente, no paga impuestos, es un tipo de empresariado cazador-recolector. Controlan el 80% y más de las tierras que produce este nivel de pobreza aberrante en el Paraguay. Casi el 30% de la población paraguaya pasa hambre. Hoy hay oro pero no hay comida para los paraguayos, en época de los españoles no había oro pero existía abundante comida. Este tipo de nación, que no es una nación, este tipo de empresariado, que no es un empresario sino un tipo de oligarquía. Esta ley de Cartes es un acuerdo de un Señor que quiere subordinar a todos al Capital. Nosotros confiamos en que otro país es posible, alternativo a lo que nos propone esta LEY, pero para eso debemos cambiar la cultura y crear la cultura de la solidaridad, de la fraternidad, y el compromiso. Tenemos que construir una alternativa diferente pero esa alternativa no va a aparecer sino cambia la cultura. Pues si esa es la cultura paraguaya, del verticalismo, del clientelismo, del autoritarismo, debemos transformarla por una cultura de exigir derechos, no mendigar favores”.
El Secretario General de SITRANDE, José Pineda señaló “La lucha contra los poderosos siempre se ha basado sobre la teoría del conocimiento y la lucha que indefectiblemente en todos los países nos ha llamado a una confrontación casi cuerpo a cuerpo. La propuesta de Ricardo y Mercedes es muy importante y hay que valorar el gesto y el compromiso de ellos. Es fundamental tener una postura, porque la falta de postura ya es una posición. Principalmente llegamos a un escenario muy parecido al que vivimos a principios del año 2000. Hoy nace una semilla y estoy seguro que hemos empezado a dar pasos para defender y confrontar con el Gobierno. La única forma de conseguir la derogación de esta Ley es la unidad entre todos los sectores sociales. Nosotros presentamos una Acción de Inconstitucionalidad contra la Ley de APP el viernes 27 de diciembre de 2013 ante la Corte Suprema de Justicia y en un tiempo record: 14 horas, resolvieron este pedido rechazándola. Esto demuestra que el Poder Ejecutivo está en connivencia con el Poder Judicial y el Parlamento para imponer esta Ley. La gente que salimos a las calles a defender el patrimonio público somos los malos que nos oponemos al progreso y al desarrollo según los grandes medios comerciales de información. El gran desafío que tenemos es otro: llegar a la mayor cantidad posible de personas. El 26 de marzo en que se realizará la huelga general es una fecha importante, y unidos debemos exigir la derogación de la ley de APP”.
El Secretario General Adjunto de la FNC Marcial Gomez expresó “el debate debe estar centrado en que con la Ley de alianza Público-Privada se busca el saqueo absoluto de las riquezas del Paraguay. Esta política que se viene desarrollando en el mundo, y en especial con Cartes en el país es darle vía libre a las grandes empresas trasnacionales para apoderarse de nuestras riquezas. No es una cuestión económica solamente, el destino y el futuro de nuestro país está en juego. El Estado paraguayo con esta política de Cartes, se va a quedar como aparato de control de la población. Y las que van a manejar el país son las grandes empresas transnacionales y corporaciones. Lo que siempre se pone en el debate cuando los campesinos hablan contra la ley de privatización es que los campesinos son atrasados y que no quieren el desarrollo. Este libro es un aporte para confrontar con argumentos claros a la ley. FNC logra entender que para desarrollar una política de desarrollo hay que utilizar las riquezas de nuestro país. Con esta Ley las instituciones de servicio público van a pasar a manos de las transnacionales. Finalmente creo que es un momento oportuno la publicación de este libro. En este momento en la campaña y en todos los distritos hay debates, la lucha sobre la movilización contra la ley de la Alianza Publico-Privada. Es un instrumento de lucha, de movilización y de confrontación. En cada momento, en cada lugar colocamos nuestro cuestionamiento y nuestra posición contra esta ley y servimos para sumar esfuerzos, nuestra capacidad de organización y de lucha. Si hay lucha, si hay organización, si hay resistencia, hay avances”.
Así mismo el Secretario General del Frente Guazú Aníbal Carrillo manifestó “Estamos saliendo de una época en que los intelectuales para ser objetivos, tenían que alejarse de las luchas populares. Hago una reivindicación de aquellos que hacen de su actividad intelectual un avance de las luchas populares. El neoliberalismo es una frase que de tanto repetir parece que perdió vigencia. Aquello que se había avanzado en temas de Derechos laborales y sociales, es incompatible actualmente con el desarrollo actual del capitalismo. Lo que se busca es seguir expoliando los recursos del país, debilitar al Estado, un Estado que se declara totalmente sometido, absolutamente endeudado e incapaz de reaccionar ante el avance del capitalismo expoliador. Alguna vez se publicó un libro “El Estado omnívoro”. Los mismos autores deberían hablar hoy del capitalismo omnívoro. Tenemos que empezar a construir entre todos un proyecto alternativo, claro y que establezca un contraste. Construir entre todos un proyecto político, con claro compromiso económico”.
Domingo Laíno, Ex candidato a la Presidencia de la Republica por el Partido Liberal Radical Auténtico en los primeros años de la caída de la dictadura de Stroessner, sostuvo “La empresa pública busca el interés general de la población, la empresa privada no. Ella no produce lo que necesita el país sino aquella que deja lucro, totalmente diferente es el fin de las empresas públicas y privadas ¿Es el Estado paraguayo suficientemente fuerte y transparente para enfrentar y dominar la corrupción imperante entre los funcionarios públicos y atajar las ambiciones de lucro de las empresas transnacionales? ¿Qué nos enseña la experiencia nacional e internacional en la materia? Argentina ha vuelto a estatizar los bienes que habían sido privatizados. El Plan de Gobierno busca priorizar la vivienda. Entre infraestructura y electricidad abarca el 55% de los 16 mil millones de dólares que se pretende invertir y para salud y educación solo resta el 8%. Todo se puede privatizar. Lo único que quizás no puedan privatizar es el aire. Con esta obra demuestran los Canese de defender siempre la soberanía nacional”.
Los autores del libro, los Ingenieros Mercedes Canese y Ricardo Canese manifestaron: “Esta Ley propone el remate y el saqueo de nuestro país. Nos engañan con que las alianzas Público-Privadas son algo exitoso que se ha hecho en otros países. El objetivo de la Guerra de la Triple Alianza se concretó en 1885 con la privatización de las tierras públicas, destruir el modelo de desarrollo económico, pero sobre todo la tierra. El objetivo del golpe de Estado parlamentario de junio de 2012 se concreta en esta Ley de APP. El saqueo, el abuso de todo el patrimonio nacional. No se va a vender la casa, se va a hacer algo peor, se va a regalar todo el patrimonio nacional al capital privado. Cartes con esta ley pone en riesgo todo nuestro patrimonio, nuestros ingresos, nuestra solvencia. No solo va a ser una privatización sino una transnacionalización de nuestras riquezas. Cartes tiene la metralleta para ametrallarnos cuando quiera. Esta ley crea un super-poder donde Cartes puede acordar lo que quiera, y esto no es un principio republicano sino monárquico y dictatorial”.
Los autores del libro “Saqueo y Abuso” La Ley de APP de Cartes escriben “La primera privatización en Paraguay, fue la venta de las valiosísimas tierras públicas a corporaciones extranjeras por precio vil. Justificada por Bernardino Caballero y otros políticos de la época, como indispensable para sanear las finanzas públicas, pagar los gastos corrientes del Estado y las deudas de guerra, según fuera tan bien documentada por Carlos Pastore, creó un ejército de campesinos sin tierra que hasta hoy subsiste… Suerte parecida corrieron los ferrocarriles y todos los servicios públicos que pasaron a pertenecer al capital inglés y a otros inversionistas extranjeros. A partir de tal nefasta privatización, el Paraguay conoció el peor rostro de la inversión extranjera, bajo un modelo extractivista que apenas creó empleos miserables para los llamados “mensú” que, hasta principios del siglo XX, vivían en un estado de explotación semi esclava en enormes latifundios, como describen magistralmente Rafael Barret y Augusto Roa Bastos”.
“No dista mucho del modelo actual de los agro negocios, que a pasos acelerados está acabando con las y los campesinos, hoy ya población minoritaria en un país cuyo principal rubro de producción y exportación, sin contar la energía eléctrica, son los granos y la carne”. “Pero ¿qué tiene que ver todo esto con la APP? La APP es la forma más salvaje de privatización y destrucción de nuestra República. La forma en que se aprobó en Paraguay es única en el mundo - por lo favorable que es para las transnacionales - nos decía el experto y ex parlamentario argentino Martín Hourest. Similar al Paraguay de la post-Guerra de 1870”.
Lo que se desea imponer en el Paraguay con esta ley de APP de Cartes - según los citados especialistas y analistas en realidad una ley de privatización de las riquezas del país - es el saqueo y la expoliación de lo poco que queda de nuestras riquezas naturales, de nuestro valioso patrimonio público a un precio vil. Esta situación vivida en el país con esta ley y lo que pretende no es nueva y ha sido a lo largo de nuestra historia la causa fundamental de nuestro atraso, subdesarrollo económico y dependencia de los imperios, de los ingleses y de los Estados Unidos fundamentalmente; y que me hace recordar que lo sostenido por Carlos Marx en su libro “El Dieciocho Brumario de Luis Bonaparte” está más vigente que nunca en el Paraguay. El pensador alemán había escrito que “Hegel ha dicho alguna vez que todos los hechos importantes de la historia universal es como si ocurrieran, digamos, dos veces. Pero omitió añadir: primero, como tragedia, y después, como farsa”.
El País a lo largo de su historia, sobre todo a fines del siglo XIX y gran parte del siglo XX padeció la tragedia que se vio despojado de sus mayores riquezas naturales: primero a través de la privatización de sus tierras que tuvo como consecuencia la creación de grandes latifundios improductivos para la población en general, donde surgieron los campesinos e indígenas sin tierras; que se convirtieron no solo en extranjeros en su propia tierra sino en esclavos modernos en pleno siglo del liberalismo económico que bajo la falacia de la libre competencia, y el libre mercado impuso en el Paraguay un régimen económico oligárquico y político autocrático-esclavista; donde las grandes corporaciones asentadas en el país instalaban y derribaban presidentes a su gusto y paladar, donde el poder ejecutivo simplemente era un administrador más de sus grandes intereses, y hoy en día con esta ley de APP de Cartes (que pretende expoliar y entregar todas las riquezas del país a las grandes corporaciones trasnacionales y convertir al Paraguay en una nueva colonia, más pobre y miserable aún que en el pasado) se puede repetir la historia pero esta vez como farsa; ya que bajo el engaño de que el Estado no tiene los suficientes recursos para desarrollar el Paraguay se recurre al sector privado para encarar el desarrollo, sin embargo esto es la mayor estafa que se busca realizar al pueblo paraguayo ¿Cómo se entiende que el único que va a arriesgar en esta alianza va a ser el Estado? Si de verdad es tan pobre como se dice y las empresas privadas no solo no van a arriesgar nada sino que se van a apoderar gratuitamente de todo el patrimonio nacional para buscar el lucro en desmedro del bien común, ¿qué va a pasar con el Paraguay?
Pero en verdad, como escribió el amigo Omar Cristaldo, “Sicilia es el lugar donde el casamiento Gobierno-Mafia es más evidente, y aquí en Paraguay el casamiento con la mafia está legalizado con la ley del APP, que es el saqueo y abuso al cual están invitados todos los inversionistas, algunos pocos nacionales y muchos extranjeros”.
Y entonces, más que nunca, la vigencia en el Paraguay del Estado Social de Derecho como lo establece nuestra Constitución será una farsa más. Una simple utopía. Pero la última palabra no está dicha, si aceptamos pasivamente esta ley seremos cómplices de las consecuencias de su aplicación. Pero, si exigimos la derogación de esta Ley y luchamos para salvaguardar la integridad de la vida de nuestro pueblo, formando una RESISTENCIA POR LA VIDA, el concepto único nos puede unir a todos. Somos seres vivos y por lo tanto tenemos que defender nuestro entorno, todo lo que es vida, si amamos nuestra vida y la de nuestros hijos, y de aquellos hijos de nuestros hijos. Entonces, solo entonces otra alternativa de sociedad y civilización será posible construir y vivir.

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