MAPUCHES NIEGAN HABER CAUSADO INCENDIOS EN EL SUR DE CHILEMartes 10 de enero de 2012 Telesurtv
El líder Héctor Llaitul lamentó la muerte de los siete bomberos. (Foto: Emol)
El grupo mapuche señalado por el Gobierno de Chile como responsable del incendio forestal en el que fallecieron siete brigadistas en el sur de la nación, negó este martes las acusaciones y aseguró que se trata de un montaje para justificar la aplicación de la ley antiterrorista contra pueblos originarios.
El líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul, emitió un comunicado en el que indica “estamos ante un montaje para justificar el uso de la ley a las comunidades mapuches en conflicto, al movimiento mapuche autónomo y en particular a la CAM”.
Añade que “se trata de una estrategia que busca consolidar la Ley Antiterrorista como una herramienta válida para enfrentar también a los movimientos estudiantiles y sociales chilenos, anticipándose a un año en el que se vislumbra mayores movilizaciones y luchas”.
El representante de la CAM lamentó la muerte de los siete bomberos y señaló que eran personas pobres que trabajaban con salarios “miserables” sin las mínimas medidas de seguridad y que fueron enviadas en definitiva a defender los intereses de una de las familias más adineradas de Chile.
En tal sentido, Héctor Llaitul afirma en el texto que la región afectada por el fuego es “un territorio ancestral mapuche usurpado por el empresariado forestal (...) los únicos causantes de esta tragedia”.
Los bosques quemados pertenecen a la Forestal Mininco, de propiedad, a su vez, del Grupo Matte, uno de los principales conglomerados empresariales del país.
Tras la propagación de incendios forestales en dos regiones del sur del país, el presidente Sebastián Piñera dijo que su gobierno tenía antecedentes de que los siniestros fueron intencionales.
Por su parte, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter acusó a la organización mapuche CAM de estar tras el origen de las llamas. Se basó en que la organización había reivindicado días antes la quema de un helicóptero que combatía incendios forestales.
Aunque el gobierno se desmarcó posteriormente de una acusación directa contra los mapuche, mantuvo la presentación de una querella criminal bajo la cuestionada ley antiterrorista en alusión al incendio de Carahue.
En el siniestro se registró la semana pasada y consumió miles de hectáreas de bosques en Carahue, a unos 700 kilómetros de Santiago, en la región de La Araucanía (oeste).
Añade que “se trata de una estrategia que busca consolidar la Ley Antiterrorista como una herramienta válida para enfrentar también a los movimientos estudiantiles y sociales chilenos, anticipándose a un año en el que se vislumbra mayores movilizaciones y luchas”.
El representante de la CAM lamentó la muerte de los siete bomberos y señaló que eran personas pobres que trabajaban con salarios “miserables” sin las mínimas medidas de seguridad y que fueron enviadas en definitiva a defender los intereses de una de las familias más adineradas de Chile.
En tal sentido, Héctor Llaitul afirma en el texto que la región afectada por el fuego es “un territorio ancestral mapuche usurpado por el empresariado forestal (...) los únicos causantes de esta tragedia”.
Los bosques quemados pertenecen a la Forestal Mininco, de propiedad, a su vez, del Grupo Matte, uno de los principales conglomerados empresariales del país.
Tras la propagación de incendios forestales en dos regiones del sur del país, el presidente Sebastián Piñera dijo que su gobierno tenía antecedentes de que los siniestros fueron intencionales.
Por su parte, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter acusó a la organización mapuche CAM de estar tras el origen de las llamas. Se basó en que la organización había reivindicado días antes la quema de un helicóptero que combatía incendios forestales.
Aunque el gobierno se desmarcó posteriormente de una acusación directa contra los mapuche, mantuvo la presentación de una querella criminal bajo la cuestionada ley antiterrorista en alusión al incendio de Carahue.
En el siniestro se registró la semana pasada y consumió miles de hectáreas de bosques en Carahue, a unos 700 kilómetros de Santiago, en la región de La Araucanía (oeste).