19 de julio de 2018  Por: Germán de los Santos

ROSARIO.- Un Peugeot color blanco, modelo RCZ, valuado en $700.000 que pertenecía a la banda de Los Monos fue secuestrado ayer en una casa del municipio bonaerense de Moreno , donde estaba escondido el vehículo que tenía pedido de captura.

Ese automóvil, patentado en 2013 en Villa Gobernador Gálvez, localidad vecina a Rosario, pertenecería a la flota de autos de la organización criminal. En abril de 2016 el tribunal de Sentencia, integrado por los jueces Eduardo Fertita, Luis Mascali y Julio Kesuani, avaló el pedido de los fiscales para el decomiso de una flota de 55 vehículos, siete propiedades y cinco chapas de taxis, que estaban en poder de la banda, cuyos 29 principales integrantes fueron condenados en abril pasado por los delitos de asociación ilícita y homicidios.

Según los investigadores, el Peugeot RCZ estaba "guardado" en una vivienda de Moreno, una zona del oeste bonaerense donde esta organización narcocriminal empezó a hacer pie cuando uno de los líderes de Los Monos, Ramón Machuca, alias Monchi, estaba prófugo, según señalaron fuentes judiciales.

La banda, pero sobre todo Machuca, comenzó a hacer negocios vinculados a la comercialización de estupefacientes en varios puntos del oeste bonaerense, donde en algunos lugares, como en Moreno, la violencia asociada al narcotráfico se hizo visible a través de varios asesinatos múltiples.

El último de ellos ocurrió el 26 de julio pasado, cuando siete personas que simularon realizar un operativo policial, irrumpieron en una vivienda del centro de Moreno y acribillaron a una mujer y dos hombres. El caso se investiga como una venganza de grupos narco.

Según datos oficiales del Ministerio de Seguridad de la Nación, Moreno aparece dentro de las cinco ciudades y municipios con mayor proporción de asesinatos con relación a la cantidad de pobladores, con una tasa, de 10,3. El tipo de violencia que supura en esa zona es similar al ajuste narco que provocó que en Rosario este año volvieran a incrementarse en más de 24% los homicidios al llegar a 115 asesinatos.

Machuca, quien está preso en el penal de Piñero, a unos 25 kilómetros de Rosario, fue detenido por la Policía Federal el 6 de junio de 2016 en el Bajo Flores, donde un grupo de la comunidad gitana de esa zona le ayudaba a mantenerse prófugo. La Tropa de Operaciones de Santa Fe, la AFI y la Policía Federal seguían sus pasos desde hacía tiempo.

Monchi estuvo tres años prófugo, aunque tuvo contactos con varios periodistas mientras estaba siendo buscado. Sus escondites rotaban entre Rosario, Buenos Aires y Córdoba, según admitió en una de las entrevistas.

Contactos metropolitanos

En ese tiempo en la clandestinidad, empezó a tejer redes y contactos en el conurbano bonaerense. Fuentes de la investigación señalaron que Machuca y su lugarteniente Mariano Salomón manejaban con socios locales bocas de expendio de cocaína en el Bajo Flores, Mataderos, Villa Luro, Liniers y Moreno.

En la Justicia habían surgido algunas pistas para investigar, pero no se profundizaron. Machuca nunca estuvo imputado ni procesado por tráfico de estupefacientes, como sí ocurrió con su hermanastro Máximo Ariel Cantero, que será juzgado en septiembre por la justicia Federal junto con una veintena de miembros de Los Monos, entre los que se encuentran su madre y su esposa.

Machuca fue condenado a 37 años de prisión el 9 de abril pasado, acusado de ser jefe de una asociación ilícita, por cohecho, encubrimiento agravado y como instigador de cuatro homicidios. Monchi era el encargado dentro de la organización criminal del manejo operativo de los búnkeres de droga en Rosario y la región. Tenía un manejo empresarial del rubro criminal, que condujo con violencia extrema.

Tres semanas después del arresto de Monchi en el Bajo Flores, cayó su lugarteniente Mariano Salomón. Fue detenido por efectivos de la Policía Federal y la TOE en un aguantadero en Lomas del Mirador, en La Matanza. Ese hombre de 31 años, que fue condenado a 4 años y seis meses de prisión, era uno de los más cercanos a Machuca y dentro de la banda era uno de los encargados, según se estableció en el juicio, de lavar y hacer circular el dinero de la venta de drogas a través de la compra y venta de autos.

Fue detenido a partir de la intervención de uno de sus celulares. En las conversaciones registradas quedó claro que Salomón era uno de los encargados de la distribución de cocaína en el oeste del conurbano. Como el objetivo era principal era detenerlo, después de permanecer tres años prófugo, la investigación sobre los vínculos y las ramificaciones en esa zona del conurbano en materia de estupefacientes quedaron a medio camino.

https://www.lanacion.com.ar/2154418-investigan-las-conexiones-de-los-monos-con-bandas-del-municipio-mas-violento